En el MUAC, la muestra Registro y residuos busca aportar a ‘‘una historiografía más crítica y robusta’’ de esa práctica, sostiene la curadora Sol Henaro
Martes 5 de febrero de 2019, p. 4
Un ‘‘aquelarre”, una fiesta con muchos invitados, es lo que ofrece Arte acción en México: registro y residuos, exposición que revisa esa práctica artística en México de 1970 a 2014, con material proveniente del Centro de Documentación Arkheia del Museo Universitario Arte Contemporáneo (MUAC).
‘‘No somos dogmáticos ni ortodoxos ni tenemos una lista de asistencia cerrada”, adelanta en entrevista con La Jornada Sol Henaro, responsable de Arkheia y cocuradora de la muestra, al lado de Cristian A. Aravena, Alejandra Moreno y Brian Smith.
Desde luego no están todos porque la escena de arte acción es ‘‘muy grande, heterogénea y rica”, apunta Henaro. Registro y residuos es ‘‘un poco arañar” con la finalidado de aportar ‘‘para que venga una historiografía más crítica y robusta cada vez”.
Conocidos artistas, como Felipe Ehrenberg –su referencia es la más temprana-–, Helen Escobedo, Marcos Kurtycz, Pola Weiss, Maris Bustamante, Teresa Margolles, Ximena Cuevas y Héctor Falcón animan la exhibición que comprende 170 materiales, 80 por ciento provenientes de los archivos documentales de Arkheia, 10 por ciento de los archivos artísticos del MUAC, mientras el restante 10 por ciento son préstamos solicitados a personajes externos. Están disponibles los 52 audios de las entrevistas efectuadas por Dulce María de Alvarado para su tesis y luego libro, Performance en México.
Henaro explica que ese museo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), mediante sus acervos, ‘‘mapea permanentemente cuáles son las prácticas y los agentes que han aportado a lo que conocemos como arte contemporáneo en México. Arkheia busca los archivos de estos agentes que son artistas, espacios independientes, galerías, teóricos, críticos, museológicos y museográficos para integrarlos al Centro de Documentación”. Actualmente tienen 50 fondos documentales y dos colecciones más en proceso de incorporación.
El cuerpo como vehículo de denuncia
Para Registro y residuos se propuso rastrear a los agentes que han hecho más visible el arte acción –performance, happening, artes vivas–, así como los espacios que lo acogieron, al igual que los concursos alusivos y las personas que escribieron sobre ese tema.
Cristian A. Aravena acota la dificultad de distinguir ‘‘un momento inaugural” o ‘‘especie de pedigrí respecto de la nomenclatura por lo complejo y flexible que ha sido habitado, en particular en México”.
El arte acción se caracteriza por ‘‘la manera en que los artistas utili-zan su cuerpo, o el cuerpo, comovehículo de denuncia, es decir, como materia para producir un posicionamiento”. Otra característica es el espacio/tiempo porque se trata de prácticas efímeras. De allí viene el subtítulo de la exposición porque sólo se puede conocer la acción mediante los residuos resguardados en los archivos. Se destaca el proceso al no vivir lo que fue esa experiencia, sostiene.
La muestra no está concebida de manera cronológica, aunque considera ocho núcleos temáticos que ‘‘permitieron en lo curatorial sugerir itinerarios de acceso para los espectadores”. El grueso del material proviene de los años 90 del siglo pasado, cuando se inauguró el Ex Teresa, ‘‘institución que daría lugar a toda la escena contracultural”.
Muchos artistas, sin embargo, se sentían ajenos a la escena de Ex Teresa, por ejemplo, ‘‘parte de la generación más cercana al grupo de Temístocles, como Abraham Cruzvillegas, Luis Felipe Ortega, Daniel Guzmán e incluso Enrique Jezik”.
Henaro apunta que el arte acción llegó a ser ninguneado, no sólo por lo efímero, sino porque en mucho es llevar al límite el cuerpo y la moral. ‘‘Hay muchas maneras de entender el arte acción. Queremos dejarlo abierto como es el arte con sus miles de maneras de crearlo”.
Arte acción en México, exposición montada en el vestíbulo de Arkheia, planta baja del MUAC (Insurgentes Sur 3000, Centro Cultural Universitario), concluirá el 21 de julio.