Con la anuencia de las autoridades de la alcaldía de Cuauhtémoc, desde finales del año pasado en el parque México comenzó la construcción de un módulo de seguridad, lo cual ha generado la inconformidad de ambientalistas que exigen detener la obra y respetar las áreas verdes.

Miguel Valencia, de la organización Ecomunidades, explicó que se trata de una obra aprobada como parte del presupuesto participativo de la colonia Hipódromo, lo cual es una práctica utilizada por los gobiernos en turno para simular participación ciudadana e imponer proyectos conflictivos.

Los promotores prefirieron construir sobre el área verde, entre árboles y palmeras, sobre suelo no pavimentado, a pesar de que existe enfrente una gran superficie pavimentada, expuso.

Indicó que hasta ahora, a pesar de las denuncias, ninguna autoridad local, de la alcaldía, del Instituto Nacional de Bellas Artes ni de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda ni de la Procuraduría Ambiental y de Ordenamiento Territorial han encontrado razón para impedir la construcción.

Agregó que la obra rompe la panorámica y la imagen del parque, elimina áreas verdes que tanto necesita esta ciudad y abre el camino para nuevas edificaciones en el futuro, pues justo al lado hace algunos años se construyeron unos baños.

Una edificación atrae más inmuebles; así todos los años se desaparecen las áreas verdes de los parques porque los servidores públicos las consideran como reserva territorial, cuando tendrían que ser sagradas para todos los que vivimos en esta ciudad, agobiada por la contaminación del aire y las islas de calor, expresó.

A su vez, Isidro López, del comité vecinal de la colonia Hipódromo, afirmó que la obra fue sometida a consulta en el presupuesto participativo hace dos años y la comunidad votó a favor, aunque reconoció que hay algunos inconformes.

Aseguró que se cuentan con los permisos y supervisión de todas las autoridades que intervienen en un espacio como el parque y no se cortó ni una planta para hacer el módulo, que ya lleva un buen avance.

Agregó que el propósito es que se asignen policías y haya monitores para cámaras de vigilancia que refuercen la seguridad en la colonia.

Según un aviso colocado por la demarcación la obra tendrá un costo de un millón 69 mil pesos.