Park City, Utah., Durante 34 años Robert Redford ha inaugurado el Festival de Cine de Sundance con una conferencia de prensa. El jueves pasado, sin embargo, el actor y cineasta dijo que estaba listo para asumir un papel secundario. Creo que hemos llegado a un punto en el que puedo pasar a otro lugar. A lo largo de los años me he perdido la oportunidad de pasar tiempo en las películas y sus realizadores, expresó.

El festival, afirmó, ya no necesita de tanta introducción.

Las primeras cintas de esta actividad, de dos semanas, se estrenaron el jueves por la noche. Aunque son muchas las tentaciones en Park City – desde experiencias de realidad virtual y actuaciones de artistas como Arcade Fire, hasta acogedoras cafeterías y conferencias de cineastas– los trabajos cinematográficos siguen siendo el principal atractivo para los asistentes a Sundance. Los boletos para las primeras funciones se habían agotado.

El festival abrió oficialmente con los estrenos de After The Wedding, adaptación de la cinta danesa de Susanne Bier, nominada al Óscar y protagonizada por Michelle Williams y Julianne Moore, y The Inventor: Out For Blood in Silicon Valley, documental de Alex Gibney sobre la fundadora de Theranos, Elizabeth Holmes.

Espero que el público se zambulla de lleno en la sicología del fraude y la del capitalismo, dijo Gibney. Eso es lo que me parece realmente interesante aquí, ese viaje de por qué creemos ciertas historias y ciertos cuentistas son efectivos engañando a la gente.

También se estrenaron el jueves Native Son, versión contemporánea de la novela de Richard Wright Memory: The Origins of Alien, sobre la película de Ridley Scott, y Apollo 11, con imágenes nunca antes vistas o escuchadas de aquella misión espacial.

El certamen este año presenta 117 largometrajes, 105 estrenos mundiales y algunas retrospectivas, como una función de La bruja de Blair por su vigésimo aniversario.

Éxitos recientes estrenados en Sundance incluyen The Big Sick, Get Out, Eighth Grade, Sorry to Bother You, RBG y Won't You Be My Neighbor?

Aun con la competencia de Netflix y Hulu algunas cintas independientes logran destacar. Pero últimamente algunos acuerdos de adquisición más caros no han sido lucrativos, como Assassination Nation del año pasado, que fue adquirida por 10 millones de dólares y terminó recaudando apenas 2.5 millones en la taquilla.

Keri Putnam, directora ejecutiva del Instituto Sundance, dijo el jueves que quería recordarle al público que el certamen es una rama sin ánimo de lucro del instituto.

En el fondo, este festival es una de las maneras más importantes en que apoyamos a los artistas, dijo Putnam. Es un hogar para artistas independientes del mundo, para formar una comunidad creativa colectiva.

Los programadores de este año prometieron retomar el elemento de descubrimiento con que Sundance se hizo de su nombre. Con la nueva directora de programación Kim Yutani, el festival también presenta un grupo de cineastas diverso: 39 por cientos de los proyectos fueron dirigidos por mujeres y 35 por ciento, por minorías.

Lo que me atrajo a Sundance en primer lugar fue mi amor por el cine independiente y el tipo de historias que han mostrado a través de los años: historias sobre forasteros, gente en los márgenes, cosas que existen fuera de lo convencional, dijo Yutani. Parte de mi meta es mantener ese legado y asegurar un programa tan diverso como sea posible.

El instituto del certamen también se ha esmerado en no sólo incluir cineastas, sino también periodistas de distintos grupos demográficos. Este año, 63 por ciento de la prensa acreditada es de grupos infrarrepresentados; el festival cubre algunos estipendios y ofrece acceso a mentores.

En cuanto a los realizadores, los resultados de un estudio realizado por la Iniciativa de Inclusión Annenberg de la Universidad del Sur de California se publicarían el viernes.

El Festival de Sundance se llevará a cabo hasta el 3 de febrero.

Más directoras, según estudio

Un nuevo estudio publicado ayer halló que un número significativamente mayor de mujeres cineastas han enviado sus películas y sido aceptadas por el Festival de Cine de Sundance en relación con hace una década, aunque las cifras siguen estando muy por debajo de 50 por ciento.

El estudio del Instituto Sundance y la Iniciativa de Inclusión Annenberg de la Universidad del Sur de California revisaron más de 26 mil presentaciones y aceptaciones para los festivales de 2017 y 2018.

Encontraron que 28 por ciento de proyectos de largometraje y episódicos presentados fueron dirigidos al menos por una mujer y 35 por ciento de ellos terminó siendo aceptado.

También se revisaron raza y etnia; así, 24.3 por ciento de los largometrajes dramáticos estadunidenses aceptados en 2017 y 2018 fueron de cineastas de color. Las mujeres negras representaron un tercio de esa cifra.

Los datos proporcionados por el Instituto Sundance para el festival de 2019 son aún más diversos, pues 38 por ciento de los largometrajes dramáticos tuvieron un director de color.

“Este estudio nos muestra dónde es robusto el pipeline para mujeres y personas de color y dónde se requiere de más apoyo”, dijo la profesora de la USC Stacy L. Smith.

Los incrementos que vimos para las mujeres en la pasada década revelan que el cambio es posible, aseguró.