El rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Enrique Graue Wiechers, recorrió el Recinto Rubén Bonifaz Nuño, ubicado en el segundo piso de la Biblioteca Central, y en la que el público en general puede consultar las obras y observar algunos de los objetos más preciados del poeta mexicano.

Reconocido como traductor de los clásicos griegos y latinos, el poeta, filólogo, catedrático, funcionario universitario e investigador Rubén Bonifaz Nuño falleció en enero de 2013, a los 89 años, en la Ciudad de México.

Todo está como si él fuera a llegar en este momento, explicó Paloma Guardia, responsable del recinto y quien mostró apuntes y dibujos que realizó el autor de La muerte del ángel y Los demonios y los días.

En el sitio hay varios objetos que indudablemente llevan a recordar al maestro: una de sus máquinas de escribir, sus chalecos y unos pocos de sus muchos reconocimientos, como la Medalla al Editor Universitario que lleva su nombre.

En este espacio se trabaja en la catalogación de su obra y puede visitarse de las 9 a las 14 horas de lunes a viernes.

Durante la visita, acompañaron al rector Vicente Quirarte, poeta, ensayista e integrante de la Junta de Gobierno; el coordinador de Humanidades, Alberto Vital, y Diego Valadés, investigador emérito del Instituto de Investigaciones Jurídicas, así como la directora de la Biblioteca Central, Elsa Margarita Ramírez, entre otros.