Miércoles 9 de enero de 2019, p. 4
Florencia. Eike Schmidt, el director alemán de la galería Uffizi y del Palacio Pitti, descorchó el año con pie de guerra, pidiendo a su país restituir el Jarrón de flores del pintor holandés Jan van Huysum (1682-1749), robado por los soldados nazis durante la Segunda Guerra Mundial.
La petición –enviada en un comunicado de prensa y en un video, colgados también en el portal del museo y en Facebook– clama que Alemania suprima la prescripción de las obras robadas durante el conflicto para garantizar la devolución a sus legítimos propietarios
.
El cuadro, identificado en 1991 –cuya cínica venta
se propuso al gobierno italiano– por ahora se muestra con una fotografía en blsanco y negro en la Sala dei Putti de Palazzo Pitti, con la palabra robado
escrita en rojo en italiano, alemán e inglés.
Según el periodista Tomaso Montanari, en una entrevista ayer en la RAI Radio 3, tras su polémico artículo publicado el mismo día en Il Fatto Quotidiano, afirma que “las obras de arte en Italia son tales que un anuncio de espectacularidad mediática como la de Schmidt no es eficaz, sino retórico.
Embargo pacífico
“Un museo de la importancia de los Uffizi, para ejercer una auténtica presión de restitución debería actuar una especie de ‘embargo’ pacífico, negando el préstamo de sus colecciones a los países que no devuelven las obras robadas.
“Desgraciadamente –continúa– este tipo de contenciosos (como el del Atleta de Fano, del Getty Museum, reclamado desde hace años por Italia) caen en manos de la diplomacia y de los estados. Italia sacrifica su arte para obtener otro tipo de beneficios. Sólo una auténtica voluntad política permitiría la restitución de las obras que le pertenecen.”
Schmidt ama Florencia y la galería Uffizi, al punto de haber aplazado su nómina para dirigir el Kunsthistorisches Museum Wien, donde debió haber tomado posesión el 1º de enero. Deberá dejar la Uffizi el 31 de octubre de 2019, cuando oficialmente expira su contrato.