Morena, junto con sus aliados de los partidos del Trabajo y Encuentro Social, se convirtió ayer en la primera fuerza política del estado de México, donde gobernará 56 de los 125 municipios en el trienio 2019-2021 y por primera vez lo hará en Naucalpan, Tlalnepantla, Atizapán de Zaragoza y Ecatepec, que están entre los más poblados.

Con este vuelco a la geografía electoral, Morena administrará las localidades donde vive más de 80 por ciento de la población del estado, mientras el Revolucionario Institucional (PRI), que hasta el 31 de diciembre gobernaba 82 alcaldías, a partir del primero de enero sólo esta al frente de 21 municipios pequeños y medianos de la zona rural.

En los últimos días de 2018 hubo protestas de burócratas y ciudadanos en Naucalpan, Atizapán y Toluca, entre otras localidades, porque fueron suspendidos los servicios públicos, principalmente el de recolección de basura.

En los primeros minutos del primero de enero las gestiones salientes entregaron los mandos de seguridad pública y protección civil a las nuevas administraciones, las cuales instalaron los cabildos. Morena gobernará algunos de los municipios más poblados, entre ellos Ecatepec, Naucalpan, Tlalnepantla, Tecámac, Atizapán de Zaragoza, Cuautitlán Izcalli, Toluca y Metepec.

También ganó en el emblemático Atlacomulco, que por primera será administrado por un partido diferente al PRI, al igual que San Felipe del Progreso, en la zona mazahua.

El tricolor sólo gobernará municipios pequeños y medianos. Los más importantes son Chimalhuacán e Ixtapaluca, donde ganó gracias al Movimiento Antorchista. En Valle de Bravo, Lerma y San Mateo Atenco logró la relección de sus alcaldes, y Villa Victoria se convirtió en el municipio más leal al PRI, pues ganó con holgura.

El Partido de la Revolución Democrática (PRD) gobernará 18 municipios, entre ellos Nezahualcóyotl, que ha convertido en su bastión desde 1996, y Tultepec, Ocuilan y Cocotitlán, donde logró la relección.

El Partido Acción Nacional (PAN) administrará 13 localidades, entre las cuales sobresale Huixquilucan; el resto son alcaldías pequeñas y rurales como Chapa de Mota, Apaxco, Soyaniquilpan y Temascalapa. Los partidos Verde Ecologista de México, Nueva Alianza, Movimiento Ciudadano y Vía Radical (de registro local) gobernarán municipios pequeños.

Las nuevas administraciones arrancan con grandes cargas financieras. Se estima que las deudas de los 125 municipios alcanzan 18 mil millones de pesos, no sólo con las bancas comercial y de desarrollo, sino también con algunos proveedores y organismos paraestatales, como la Comisión Nacional del Agua, la Comisión Federal de Electricidad y el Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios.

Los nuevos alcaldes deberán enfrentar además cientos de sentencias por juicios laborales heredados. Algunos comenzaron negociando con empleados a quienes no se les pagaron prestaciones de fin de año.

En Ecatepec, el alcalde morenista Fernando Vilchis Contreras designó director de seguridad pública y tránsito a Guillermo Fragoso Estévez Marcelo, padre del sexto regidor de Morena, Guillermo Fragoso.

Regidores de oposición de PRI, PAN y PRD acusaron a Fernando Vilchis de violar la ley al permitir el nombramiento de Estévez Marcelo. Vitorino Barrios Dávalos, contralor del poder Legislativo del estado de México, afirmó que este nombramiento constituye nepotismo.

En Naucalpan, Patricia Durán Reveles, de Morena, anunció un plan emergente de recolección de desechos domésticos, después de que el ex alcalde panista Víctor Gálvez Astorga se olvidó del servicio.

Con 143 camiones recolectores, 640 trabajadores municipales y el apoyo del sindicato Francisco Villa de la Construcción, Comercio, Servicios, Transporte Similares y Conexos, Durán prometió limpiar Naucalpan en una semana.