Madrid. Este año que comienza cumplen dos décadas 20 míticas películas; fue una etapa grande para el cine.

En Milagros inesperados, de Frank Darabont, basada en la novela de Stephen King, Tom Hanks se mete en la piel de Paul Edgecomb, funcionario de prisiones que conocerá al extraño John Coffey, condenado a muerte con un don. El filme fue postulado a cuatro Óscares.

En Matrix, de Lilly y Lana Wachoswski, por primera vez se entra al mundo de Matrix. Keanu Reeves es Thomas Anderson, un brillante programador que por las noches es Neo, un poderoso hacker. Un día, Thomas recibe una enigmática visita. Fue el comienzo de una de las sagas más importantes del cine actual.

Otra película memorable es American Pie, de Paul y Chris Weitz. El público conoció Jim, un adolescente, friki de la informática, desesperado por perder su virginidad. Comedia juvenil que acabó convirtiéndose en una franquicia de seis cintas.

Con El club de la pelea, David Fincher, tras Seven y The Game, seguía labrándose un hueco entre los realizadores venerados de los tiempos recientes. Se le considera de culto.

Todo sobre mi madre, de Pedro Almodóvar, logró un Óscar. Es considerada una de las mejores películas del director, quien arrasó en el mundo por su punto de vista sobre el duelo y la maternidad.

Crueles intenciones, de Roger Kumble, es una reinterpretación adolescente de Las amistades peligrosas, de Choderlos de Laclos, un perverso drama protagonizado por Ryan Phillippe, Sarah Michelle Gellar y Reese Witherspoon, quien marcó tendencia en una época de adaptaciones de clásicos literarios en curiosas cintas para adolescentes.

La momia, de Stephen Sommers, recuperó el interés por el cine de aventuras que tan bien funcionó en los años 80. Brendan Fraser y Rachel Weisz se embarcan en una expedición por el antiguo Egipto en la que se adentrarán en la ciudad de los muertos.

El proyecto de la bruja de Blair, de Daniel Myrick y Eduardo Sánchez, dio a conocer la leyenda urbana de ese personaje. En 1999 también se logró popularizar un nuevo tipo de película, las cintas de metraje encontrado, con las que la sensación de realidad aumenta.

El comienzo de las precuelas de Star Wars

Star Wars. Episodio I: La amenaza fantasma, de George Lucas, es el comienzo de la trilogía de las precuelas de la guerra de las galaxias. En esta parte se conocen un jovencísimo Anakin Skywalker, el futuro Darth Vader, y Obi-Wan Kenobi, interpretado por Ewan McGregor.

Spike Jonze debutó hace 20 años con Cómo ser John Malkovich. Comedia surrealista considerada una de sus mejores películas.

En Notting Hill, de Roger Michell, Julia Roberts en tierras británicas conquista al galán inglés por excelencia de los años 90, Hugh Grant.

Solas es el debut de Benito Zambrano. Es un amargo y acertado drama social sobre dos mujeres, madre e hija, al borde de la marginación social. Premio del Público en la Berlinale y ganadora de cinco Goyas.

En Ojos bien cerrados, largometraje póstumo de Stanley Kubrick, Tom Cruise y Nicole Kidman desnudaban ante el público sus problemas conyugales.

Belleza americana, de Sam Mendes, es un demoledor retrato de la clásica familia burguesa estadunidense. Fue considerada mejor película de 1999 por la Academia de Cine Hollywood.

Con Tarzán, de Kevin Lima y Chris Buck, Disney despedía su nueva época dorada. Con canciones de Phil Collins, fue el último clásico de esos estudios en ganar un Óscar hasta la llegada de Frozen.

Brad Bird deslumbró con la fascinante El gigante de hierro, auténtica obra maestra de la animación que fue incomprendida en su estreno y que, 20 años después, ha logrado tener el cariño del público.

Boys Don’t Cry, de Kimberly Peirce, fue la película con la que el público conoció a Hilary Swank, basada en hechos reales, mostró que la muerte del chico transexual Brandon Teena fue un crimen de odio que conmocionó a la comunidad LGBT.

Toy Story 2, de John Lasseter, es una de las grandes maravillas de Pixar. Los juguetes regresaron con una nueva aventura, en la que debían rescatar a Woody y en la que el público conoció a la entrañable vaquera Jessie y al fiel caballo Perdigón.

En Sexto sentido, de M. Night Shyamalan, un jovencísimo Haley Joel Osment confesaba a un aturdido Bruce Willis que, en ocasiones, veía muertos. Película con la que Shyamalan deslumbró a Hollywood y le permitió codearse entre los grandes de la ciencia ficción.

José Luis Cuerda lleva al público al comienzo de la Guerra Civil española con La lengua de las mariposas, película basada en la novela de Manuel Rivas.