Miércoles 21 de noviembre de 2018, p. 21
Nada impide aumentar el salario mínimo general a 102 pesos a partir del primer día de 2019, aseguró la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), aunque discrepó de que pueda duplicarse como propuso el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador.
En conferencia de prensa, el presidente del sindicato patronal, Gustavo de Hoyos Walther, reiteró que hay condiciones para elevar el minisueldo en la revisión que haga la Comisión Nacional de Salarios Mínimos en diciembre próximo como resultado de una decisión tripartita.
Pensamos que se puede llegar a la línea de bienestar
, aseguró antes de recordar que con los aumentos al salario mínimo no han aparecido los jinetes del Apocalipsis
, es decir, no ha habido efecto faro
, no se ha provocado inflación, las empresas no han dejado la formalidad para pasar a la informalidad y tampoco se han desacelerado el crecimiento y el empleo.
De Hoyos Walther fue optimista al señalar que en esta ocasión sí se puede lograr dicho aumento, pues hay coincidencias con la nueva administración para que ello sea vigente a partir del próximo primero de enero. Sin embargo, al ser interrogado sobre la propuesta del presidente electo de duplicar el minisalario, que actualmente es de 88.36 pesos, De Hoyos Walther discrepó de lograr un aumento a poco más de 160.
De acuerdo con López Obrador, en la frontera norte, como parte de un plan de estímulos –que incluye la disminución del impuesto al valor agregado a 8 por ciento y el impuesto sobre la renta corporativo a 20 y homologar los precios de los energéticos con los de Estados Unidos–, el salario se duplicará, pero la Coparmex consideró que es necesatio analizar el impacto.
Añadió que elevarlo puede causar una emigración doméstica, por lo que se tiene que valorar bien, a pesar de la buena intención del presidente electo.
Si bien celebró que la futura administración tiene un plan para los estados del norte y sureste, sostuvo que es necesaria una estrategia para Puebla, Aguascalientes, Guanajuato, San Luis Potosí y estado de México, que conforman la zona central, pues esa área genera un desarrollo económico de dos dígitos y permite balancear los crecimientos negativos del sureste.
Agregó que ahí se requiere una política especial para garantizar que los clusters, que incluye el automotriz, sigan siendo motor de desarrollo. De lo contrario no se logrará crecer a 4 por ciento como ha planteado el tabasqueño.
Por otra parte, comentó que de acuerdo con Data Coparmex la confianza empresarial no ha tenido variación desde antes del primero de julio pasado, pues oscila entre 50 y 51 por ciento, lo cual significa que la mitad de los empresarios sienten confianza para seguir invirtiendo y la otra no, pero no es algo atribuible sólo al próximo gobierno federal, sino también al Congreso de la Unión.