La próxima secretaría de seguridad no debería tener el control del aparato de inteligencia; tampoco se tendría que concentrar en una dependencia las estrategias de seguridad pública y seguridad nacional, indicaron expertos en la materia.

La desaparición de la Comisión Nacional de Seguridad dará paso –de acuerdo con la iniciativa de Morena que reforma la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal– a la secretaría de seguridad y protección ciudadana que se encargará del centro nacional de inteligencia.

La propuesta que se encuentra en la Cámara de Diputados señala que la nueva secretaría de seguridad coordinará y establecerá mecanismos para contar oportunamente con la información de seguridad pública y nacional.

También tendrá funciones en prevención del delito, administrar el sistema penitenciario federal y proponer programas de protección civil ante desastres naturales.

Martín Barrón Cruz, profesor investigador del Instituto Nacional de Ciencias Penales, advirtió que seguridad pública y seguridad nacional son términos que no pueden estar en una sola dependencia.

Vamos a seguir en el mismo es­quema de violencia y confrontación. La inteligencia civil es diferente a la militar; no se podría juntar todo en un solo aparato de inteligencia, indicó.

Armando Rodríguez Luna, investigador del Colectivo de Análisis de la Seguridad con Democracia, se pronunció por cambiar el andamiaje institucional relacionado con seguridad pública; es decir, desincorporar la seguridad de la Secretaría de Gobernación.

Sin embargo, dijo que el aparato de inteligencia tendría que estar fuera de la secretaría de seguridad y que sea una instancia que coordine las áreas de inteligencia para que genere información clave para la toma de decisiones en el marco del consejo de seguridad nacional.

El documento que presentó del diputado Mario Delgado menciona que la secretaría de seguridad y protección ciudadana será la “responsable directa de labores de inteligencia vinculadas con el comportamiento delictivo, que coadyuve con dependencias y entidades en las tareas de reconstrucción del tejido social del país.

Es importante que esta dependencia tenga a su cargo la seguridad nacional, así como las atribuciones que garanticen la protección civil de las personas, señala.

Barrón mencionó que seguimos en proceso de experimento y de ocurrencias en que se está confundiendo seguridad pública con seguridad nacional y seguridad interior.

Rodríguez Luna indicó que la seguridad nacional no es una dimensión sobre la cual se pueda trasladar a una sola secretaría de Estado, pero sí debe fortalecerse tanto en presupuesto como en sus funciones.