Infiltrados pretenden generar caos
Lunes 29 de octubre de 2018, p. 5
Tapanatepec, Oax., La caravana migrante acordó este domingo permanecer en el municipio de San Pedro Tapanatepec, localizado casi en los límites con Chiapas, con el propósito de reorganizarse para crear grupos de seguridad y evitar cualquier tipo de incidentes, como el suscitado la noche del sábado, cuando se rumoró el intento de robo de un menor por un guatemalteco.
La caravana se detendrá 24 horas y el lunes vamos a salir de Tapanatepec a las tres de la madrugada con rumbo al poblado de Santiago Niltepec, esto para reorganizarnos, por fortuna no hubo ningún robo de menor
, informó Alexis Orozco, integrante de la caravana.
Destacó que el supuesto intento de robo fue un rumor esparcido por grupos infiltrados en la caravana; además, el estado de salud del menor y migrante guatemalteco es estable y no hay ningún detenido por las autoridades
. La noche del sábado circuló la versión del intento de secuestro y el presunto linchamiento de un migrante por ese motivo.
Señaló que el supuesto incidente fue mandado para crear un caos y que digan que los de la caravana están creando violencia y dejarlos mal
ante todos. Casualmente en ese momento no nos acompañaba ninguna organización de derechos humanos, pero por fortuna no pasó a mayores
.
Explicó que los comisionados que estarán a cargo de la seguridad se ubicarán en cada uno de los campamentos y espacios públicos, portarán un chaleco verde para ser identificados, a fin de evitar incidentes.
María Amparo Ramírez, mujer migrante, pidió respeto para sus derechos humanos y expresó que ya nada las detendrá para continuar su camino
. Agradeció la solidaridad de los mexicanos y ahora que avanzan por Oaxaca, refirió, el recibimiento ha sido muy bueno.
Todas nosotras traemos un sueño y esto representa el sacrificio. Vengo con mi madre caminando y lo único que pedimos es que respeten nuestros derechos, no importa la religión que sea; (porque) vamos a llegar a Estados Unidos, esa es nuestra meta y lo vamos a lograr todos juntos
, manifestó.
Los migrantes originarios de Honduras, El Salvador y Guatemala se instalaron en diversos puntos del poblado, algunos en el parque central, el auditorio municipal, en las banquetas y en patios de viviendas que resultaron afectadas por el terremoto del año pasado.
Los servicios de salud de Oaxaca dieron atención médica, principalmente a los niños que han sufrido padecimientos virales, como gripa y tos, o enfermedades gastrointestinales.
Mientras el grueso de la caravana se instaló en Tapanatepec, Byron, de 15 años de edad y sus 10 amigos, todos de Honduras, prefirieron seguir su ruta. Caminaron por cuatro horas a pie, pidieron aventón, pero nadie los recoge.
Dijeron que agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) les informaron que podían seguir y nadie los detendría. Su meta es llegar a Juchitán y esperar a la caravana para avanzar hacia la frontera, porque su sueño es trabajar en Estados Unidos.
Caminar bajo el sol ha sido muy fuerte, la gente nos da alimentos, pero no es suficiente, todos dejamos a nuestras familias y recientemente les llamamos para decirles que estamos bien, es duro salir y dejar tu país, pero allá no hay empleo y la violencia está muy fuerte
, narraron.
A la orilla de la vía federal panamericana se observa a los defensores de los derechos humanos de Oaxaca, a elementos de la policía federal y estatal, así como a inspectores del INM.
En tanto, otro grupo de 200 personas llegó al poblado de Niltepec para rencontrarse, el lunes, con la caravana.