La Ciudad de México vive una crisis en materia de manejo de la basura, pues no ha logrado encuadrar una verdadera política de separación, reuso y reciclamiento de sus residuos sólidos, afirmó la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Nashieli Ramírez.

Consideró que más allá de la suspensión de la planta de termovalorización, la próxima administración capitalina debe impulsar soluciones amigables con el medio ambiente y con el crecimiento de la ciudad, para evitar colocarnos en una situación de riesgo.

Desde la CDHDF se impulsará una discusión con expertos y académicos alrededor de cuáles son las posibles soluciones para el manejo diario de 12 mil 500 toneladas de basura, pues ha quedado demostrado que los rellenos sanitarios no lo son.

La ombudsperson señaló que se tiene un grave problema con los basureros, pues todavía existen varios clandestinos en la ciudad, pese a los esfuerzos de las autoridades de separar los residuos sólidos, los cuales no han avanzado.

Ello nos obliga a volvernos a sentar y ponernos de acuerdo, porque estamos ante una crisis, ya que no contamos con una política de manejo de dichos residuos, y buena parte de los recursos se destinaron al proyecto de la termovalorizadora.

Los sectores que abogaban no era buena idea; argumentaban que no se estaba usando en Europa, tenía una vida útil muy corta y había otros procedimientos, por lo cual esperaremos a que el siguiente gobierno impulse mesas de discusión.

Se trata, dijo, de que expertos en el tema, académicos y funcionarios evalúen las diversas soluciones para el manejo de la basura, tras la suspensión del contrato para la prestación de los servicios a largo plazo de esa obra, que ordenó el Tribunal de Justicia Administrativa.

Mencionó que una de las soluciones es aprender a manejar nuestra basura, mediante su reciclamiento y/o reutilización, y reducir las grandes toneladas que generamos.