El tema del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) causó polémica en el Congreso y en partidos políticos, a menos de una semana de realizarse la consulta que realizará el gobierno electo.

En la Cámara de Diputados, la nueva mayoría desechó una propuesta del PRI que pretendía solicitar al presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, “respetar la legalidad, la imparcialidad y la viabilidad técnica en su construcción. Por separado, la dirigencia nacional del PAN aseguró que la incertidumbre por el proyecto ha provocado el retiro de inversiones por un monto de 538 millones de dólares.

Ayer, durante la sesión del pleno en San Lázaro, se enfrascaron en un debate de dos horas y media sobre el alcance de la consulta.

¡La consulta va!, exclamaron diputados de Morena, ante las críticas del tricolor respecto de que ese ejercicio no tiene base constitucional ni legal.

El nuevo gobierno no genera certidumbre. Y la incertidumbre no es la mejor atribución de un gobierno. ¡Su consulta es insulta!, devolvió en tribuna el priísta Eduardo Zarzosa.

Desde la perspectiva de la bancada del PRI, López Obrador se metió en un embrollo, porque desde la campaña anunció la cancelación de las obras en Texcoco, y que la consulta sólo quiere legitimar una decisión anticipada.

Esa postura también fue expresada por el PAN, que de paso propuso también preguntar a los ciudadanos si quieren que el próximo gobierno baje el precio de los combustibles, y también por Movimiento Ciudadano, que consideró a la consulta como fuera de causa legal, no representativa ni vinculante.

Laura Imelda Pérez, de Morena, dijo que la consulta involucra a la sociedad con objeto de que participe en las decisiones. Este proceso reconoce la sabiduría del pueblo. No es estrictamente constitucional, porque las leyes no contemplan la participación de la sociedad.

Sobre el tema, Marcelo Torres, dirigente del PAN, afirmó que entre julio y septiembre se presentó la fuga de inversiones, y afirmó que los hombres de negocios están viendo con mucho nerviosismo invertir en el país.