Policías formaron una valla, pero permitieron su paso; suman mil 600 los que buscan llegar a Estados Unidos
Martes 16 de octubre de 2018, p. 11
Aunque los gobiernos de México y Guatemala aseguraron que no permitirán el paso de quienes no cumplan con los requisitos legales, alrededor de mil 600 hondureños que forman parte de la Caminata Migrante entraron a territorio guatemalteco. Un video de un medio digital captó el momento en que la columna de hombres, mujeres y niños levantó la barra metálica de seguridad y cruzó la frontera.
Las autoridades de Guatemala no emitieron ningún comentario. Alrededor de 100 efectivos de la policía guatemalteca habían formado una valla para impedir el paso, pero no intervinieron ante la masiva incursión. A su vez, la Iglesia católica de este país manifestó su apoyo a la caravana después de que el gobierno amenazó con impedir su ingreso tras alegar un supuesto origen ilícito
del movimiento.
De manera específica las autoridades migratorias de Guatemala afirmaron que no se permitiría el ingreso de personas que formen parte de movimientos que con fines ilícitos alteren el orden y la seguridad nacional
. Señalaron que la medida también responde a que se vulnera la protección de la niñez y adolescencia
.
Más tarde, el Instituto Nacional de Migración (INM) informó a los integrantes de la Caminata Migrante –que partió de San Pedro Sula, Honduras, el pasado 13 de octubre– que de arribar a los puntos de internación de la frontera sur mexicana su personal deberá revisar el cumplimiento de los requisitos que marca la ley y a quienes no los tengan no se les permitirá el ingreso. El organismo reiteró su compromiso con el respeto a los derechos humanos de los migrantes, independientemente de su nacionalidad o condición migratoria.
Los hondureños intentan llegar a Estados Unidos para escapar de la pobreza y violencia de su país, que consideran más peligrosas a lo que pueden enfrentar en la travesía.
La marcha se inició un día después de que el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, se reuniera en Washington con los mandatarios de Guatemala, Jimmy Morales, y de Honduras, Juan Orlando Hernández, así como con el canciller Luis Videgaray para tratar temas migratorios. Allí pidió a los gobiernos que desalienten a los migrantes de ir a su país.