Ciudad Juárez, Chih., Los más de 2 mil niños detenidos sin sus padres o familiares cercanos que se encuentran en el centro de retención de Tornillo, Texas, cerca de Ciudad Juárez y El Paso, pasarán en ese lugar varios meses y se desconoce qué sucederá después con ellos, lo cual es motivo de una gran preocupación, aseguró el activista estadunidense Fernando García, dirigente de la Red Fronteriza de Derechos Humanos.

Por su parte, el consulado de México en El Paso informó que los niños que se encuentran en Tornillo no son mexicanos, sino de otras nacionalidades, principalmente centroamericanos.

García dijo que Tornillo no es una guardería, es una cárcel para niños y eso es injustificable; cada día que pasa y esos niños están en esa lugar se está causando un impacto sicológico y ahorita están diciéndonos que van a pasar meses detenidos. Eso es injustificable.

Indicó que la organización no gubernamental que encabeza exige que se cierre el centro de detención y que los cientos de menores de edad que ahí se encuentran queden al cuidado de familias, de grupos comunitarios o directamente con sus parientes.

Afirmó que una gran preocupación entre activistas es la sospecha de que los menores internos en Tornillo serán deportados, pues haber sido enviados a la frontera desde centros de detención de todo Estados Unidos implica la antesala de una repatriación masiva.

Pese a múltiples intentos, no se ha permitido a la Red Fronteriza de Derechos Humanos ingresar para ver a los pequeños y verificar el estado en el que se encuentran. Desde principios de octubre, otras ONG informaron que cientos de niños que fueron separados de sus padres o capturados por viajar solos, procedentes de ciudades como Kansas, Nueva York y otras grandes urbes, están en Tornillo, a unos 50 kilómetros de Ciudad Juárez.

Los menores provienen de refugios de origen religioso y de albergues privados que cumplen condiciones adecuadas para dormir, comer y educarse y ahora lo van a hacer en tiendas de campaña tipo militar, donde caben hasta 80 menores.

En tanto, el cónsul de México en El Paso, Ricardo Hernández, aseguró que ninguno de los niños que se encuentran en el centro de detención de Tornillo es mexicano: Los menores que entran (sin documentos a Estados Unidos) y que son detenidos inmediatamente son puestos a disposición de autoridades estadunidenses y nos avisan para hacer la entrevista consular y proceder a su repatriación a través del Instituto Nacional de Migración, ya sea con sus familiares que ya se ubicaron dentro de territorio nacional o en su caso a la autoridad competente, que es el DIF.