Lunes 15 de octubre de 2018, p. 34
Habitantes del Centro Histórico colocaron un tendedero informativo
para exigir a las autoridades capitalinas retirar más de 100 puestos metálicos que se instalaron en la plaza San Juan o Pugibet, frente a la iglesia del Buen Tono, que desde hace una década comenzó a ser rescatada por la propia comunidad, para recuperar el tejido social.
Cristina Zaragoza, vecina de la calle Peredo, explicó que durante años este espacio estuvo convertido en un tiradero de basura y refugio de indigentes, pero mediante distintos proyectos, entre ellos un centro cultural sobre ruedas –que incluso fue reconocido como uno de los mejores del presupuesto participativo–, se logró recuperar.
Detrás de la zona turística del Centro Histórico hay una comunidad marginada que no tiene sitios de recreación o esparcimiento, y esta es una de las pocas plazas que no están invadidas por el comercio ambulante, afirmó.
En 2008, después de tocar muchas puertas, se logró hacer peatonal la calle Buen Tono y después remozar toda la plaza, con recursos del programa de Mejoramiento Barrial y del presupuesto participativo. Han sido distintos los esfuerzos y se han obtenido apoyos de diferentes dependencias capitalinas
, apuntó.
Sin embargo, desde hace un mes la Secretaría de Desarrollo Económico comenzó a instalar los módulos de metal en los andadores de la plaza, para reubicar a los comerciantes del mercado de artesanías, con el argumento de que será rehabilitado por los daños que le provocó el sismo.
Arturo Vázquez, también vecino del Centro, indicó que no ha habido transparencia en la información y el proyecto que se ejecutará no se ha presentado ni a los propios comerciantes, algunos de los cuales no están dispuestos a salirse del mercado, pues no hay garantías para su regreso.