Managua. La Policía de Nicaragua dispersó este sábado con detonaciones una manifestación antigubernamental que pretendía recorrer la zona oriental de la capital, informaron medios locales.

La policía nicaragüense informó el viernes que las marchas opositoras son ilegales y que perseguirá a quienes continúen violentando la paz, de cara a la protesta Nicaragua en Rebeldía que la oposición convocó para este sábado en la capital.

Camionetas llenas de policías antimotines dieron persecución a decenas de manifestantes opositores que decidieron marchar tras concentrarse en una rotonda situada al sudoriente de Managua, donde un jefe policial les advirtió sobre la reciente prohibición de protestar, informó el Canal 100% Noticias.

La televisora transmitió imágenes de los participantes que enarbolaban banderas azul y blanco de Nicaragua, que ante el acecho policial avanzaban accidentadamente por las calles del barrio El Riguero, posteriormente se escucharon las detonaciones que dispersaron la movilización.

Habitantes de la zona abrieron las puertas de sus viviendas para dar refugio a los opositores, mientras algunos testigos mostraban a la televisora lo que parecían ser cartuchos de granadas aturdidoras, artefactos comúnmente utilizados por los cuerpos antidisturbios.

¿Por qué ellos si pueden marchar y nosotros no?, reclamó un manifestante, en alusión a la contramarcha con protección policial que simultáneamente realizaban simpatizantes del gobierno del presidente Daniel Ortega, en otro punto de Managua.

El incidente ocurrió horas después que la policía decretó como ilegales las protestas opositoras y advirtió que llevaría ante la justicia a quienes convoquen a marchar para que respondan por eventuales disturbios,responderán ante la justicia las personas y organismos que convocan a estos desplazamientos ilegales desde los cuales se han promovido y se intenta promover acciones delictivas, destructivas y criminales, señaló el comunicado en el que se advirtió que tanto personas como entidades convocantes también serán responsables de cualquier amenaza, daño, o riesgo a la vida que ocurra en las manifestaciones.

En tanto, movimientos sociales y activistas de derechos humanos locales rechazaron la decisión de delcarar ilegales las protestas opositoras y que además intenta criminalizar a quienes las convocan, informaron medios locales. La Oficina del Alto Comisionado de la Organización de Naciones Unidas en Managua, manifestó en Twitter su preocupación por el anuncio y llamó al ejecutivo a asegurar el pleno respeto del derecho a la libertad de reunión pacífica según los estándares y normas internacionales de derechos humanos aplicables.

En este contexto, el presidente Ortega, advirtió este sábado que el proyecto de sanciones que el Congreso estadunidense discute contra su gobierno es injerencista y dañino para la economía nicaragüense. Estados Unidos sigue con una política injerencista, irrespetuosa de las leyes internacionales, criticó el mandatario durante un acto masivo en Managua, en alusión a la iniciativa conocida como Nica-Act (Nicaragua Investment Conditionality Act), que propone condicionar los préstamos internacionales a Nicaragua.