Las metas de la Estrategia Nacional para la Prevención del Embarazo en Adolescentes (Enapea) de reducir 50 por ciento la tasa de fecundidad en mujeres de 15 a 19 años y de erradicar los nacimientos en niñas de 10 a 14 años están en riesgo si no se da continuidad a esta política en la próxima administración.

Organizaciones integrantes del Grupo Interinstitucional para la Prevención del Embarazo en Adolescentes coincidieron en que la evolución de esta política ha sido principalmente a nivel teórico: se tienen estudios y conocimientos de las múltiples causas, pero hace falta que se concreten.

Los avances registrados no han tenido un impacto contundente, aseguró Eliana Olaizola, directora de IPAS México. Expuso que la tasa de fecundidad en adolescentes a escala global es de 49 nacimientos por cada mil, pero en el país era de 74 en 2015 y se espera que este año llegue a 70.5. Las cifras que también alertan, dijo, son las de embarazos en niñas. En México los nacimientos en niñas de 10 a 14 años era en 2003 de 7 mil 277. En 2016 hubo 11 mil 808 y en 2017 esta cifra disminuyó 0.5 por ciento. Destacó que hay poca información sobre el embarazo en menores de 15 años. Según datos recabados por la organización, la violencia sexual intrafamiliar es una de las causas principales.

Fernanda Díaz de León, coordinadora de políticas y abogacía en IPAS México, aseguró que si se sigue avanzando en estos términos no se alcanzará la meta de erradicar los embarazos en menores de 15 años. Por otra parte, Corina Martínez, de la organización Balance, junto con Alexis Flores, de Democracia y Sexualidad, pidieron que se fortalezca la participación de la Secretaría de Educación Pública en la aplicación de la Enapea, pues para reducir los embarazos en la adolescencia no sólo son necesarios los métodos anticonceptivos, también se necesita educación integral en sexualidad.