Ecatzingo, Méx., Ecatzingo, el municipio del estado de México más cercano al epicentro del sismo del 19 de septiembre de 2017 (19-S), sigue en reconstrucción. A un año del evento telúrico todavía son evidentes los daños que provocó en más de mil 500 viviendas y siete escuelas de esta demarcación ubicada a 14 kilómetros del volcán Popocatépetl.

Junto con otros 10 municipios, Ecatzingo fue incluido en la declaratoria de desastre, llegaron apoyos de la Cruz Roja, asociaciones viviles, y recursos del Fondo Nacional de Desastres Naturales (Fonden); pero no alcanzó para todos los damnificados.

Marciano Barrera, vecino afectado, empezó la reconstrucción de su hogar, cuya estructura se fracturó y fue demolida. Recibió material para la construcción y dinero en efectivo para levantar su patrimonio.

Al respecto, Marcelino Robles Flores, alcalde de Ecatzingo, informó que en total se censaron mil 358 casas dañadas; 900 con pérdida total y el recurso alcanzó para 90 por ciento de los damnificados, y a un año del 19-S, la mayoría de las casas que requirieron reconstrucción, tienen un avance de 85 por ciento. De las siete escuelas dañadas, dijo, dos resultaron con pérdida total y ya se asignaron recurso para su redificación, aunque falta que inicien las obras; mientras los alumnos toman clase en aulas provisionales.

Respecto a por qué hay gente que sigue sin recibir los apoyos, el edil recordó que una semana después del sismo, el volcán Popocatépetl tuvo intensa actividad y eso asustó a decenas de vecinos que abandonaron su hogar; cuando regresaron ya había concluido el censo del Fonden. Aseguró que de estas familias, 25 recibieron recursos del gobierno estatal. Dijo: tiene que hacerse un nuevo censo muy estricto para ver el tema de la reconstrucción. Hace más de 10 días la Cruz Roja Mexicana entregó electrodomésticos, colchones y despensas para los damnificados.

A unos kilómetros de distancia se ubica Atlautla, otro de los municipios mexiquenses afectados por el sismo. Aquí, Alicia Velázquez Vázquez se quedó sin vivienda; pero por vivir en el mismo predio que su cuñado, cuya casa también quedó inhabitable, no recibió los recursos del Fonden.

Los representantes del Fonden especificaron que no era posible beneficiar a más de una familia por predio. Su esposo, Alejandro Soriano, decidió que su hermano Rigoberto recibiera los 90 mil pesos en materiales y 30 mil pesos en efectivo.