La seguridad es una de las exigencias en común de los pliegos presentados por alumnos de distintas asambleas de facultades y bachilleratos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Tras el ataque sufrido por alumnos del plantel Azcapotzalco del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) –el 3 de septiembre frente a la Torre de Rectoría– a manos de un grupo de choque, en las unidades académicas se realizaron paros de labores y asambleas en las que se acordaron distintas demandas, que han sido presentadas a las autoridades universitarias.

Las exigencias pasan por la democratización de las decisiones en la Universidad Nacional y el castigo a los responsables de la agresión, que dejó al menos seis heridos, dos de ellos graves.

Estudiantes de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Cuautitlán entregaron el jueves un pliego petitorio en la Torre de Rectoría. Entre sus demandas está tener una reunión con autoridades del estado de México para discutir asuntos de seguridad en el transporte público. También demandan a la UNAM mayor seguridad en las instalaciones de la FES y en sus inmediaciones, así como impulsar rutas de transporte seguro para la comunidad universitaria.

La asamblea de la FES Acatlán demandó acciones contundentes para la prevención y sanción de la violencia contra las mujeres, así como medidas de seguridad en el plantel que sean discutidas con estudiantes, profesores y trabajadores.

La Facultad de Ciencias Políticas y Sociales demanda la reforma a la Ley Orgánica de la UNAM, mediante un Congreso Universitario, para la democratización de la máxima casa de estudios. También pide la desarticulación de los grupos porriles, la creación de un organismo integrado por alumnos, profesores y trabajadores para aplicar una nueva estrategia de seguridad en la universidad, así como la restructuración y capacitación integral del personal de vigilancia de todos los campus, entre otros puntos.

Las peticiones de los estudiantes de la Facultad de Derecho incluyen la creación de una comisión encargada del estudio y seguimiento jurídico de los casos de violencia de género en la universidad.

La asamblea de la Facultad de Contaduría y Administración incluye el retiro de las rejas en el área de frontones de Ciudad Universitaria, pues considera que no solucionan el problema de la inseguridad y sí limitan la movilidad.

Los estudiantes de Medicina han planteado entre sus exigencias que se mejore la iluminación y la seguridad en las inmediaciones de Ciudad Universitaria. Han dicho que la comunidad estudiantil sufre violencia en la universidad, en los hospitales y unidades rurales donde toman clases y realizan estancias y servicio social.

En el caso de Química, su asamblea estudiantil planea incluir en su pliego petitorio demandas como el manejo transparente de las cuentas del plantel, aumento de becas alimentarias y de transporte, un comedor digno y accesible económicamente, mejoramiento del servicio de fotocopias, extensión del horario de los quimibuses y la realización de un protocolo de seguridad efectivo.

La Facultad de Estudios Superiores Zaragoza, por su parte, demanda en su pliego local que haya capacitación suficiente de los cuerpos internos de vigilancia, garantizar el transporte seguro y apropiado de los alumnos que requieran trasladarse a clínicas periféricas, crear un protocolo multidisciplinario contra la violencia de género y mejorar la infraestructura de laboratorios y consultorios.