Zacatecas, Zac., Una vez concluido el relevo en las 58 presidencias municipales de la entidad, el pasado 15 de septiembre, los nuevos alcaldes de las tres principales ciudades (Fresnillo, Guadalupe y Zacatecas), emanados del partido Morena, encontraron deudas millonarias que les dejaron autoridades priístas.

El caso más grave es el de Guadalupe, conurbado a la capital de Zacatecas, donde Julio César Chávez Padilla aseguró que su predecesor, Enrique Flores Mendoza –quien fracasó en su intento de relegirse– dejó un pasivo superior a 688 millones de pesos.

Chávez Padilla fue conductor de televisión, incursionó en política y hasta hace tres meses militó en el Partido Revolucionario Institucional (PRI). Incluso fue secretario general del ayuntamiento en la administración de Roberto Luévano Ruiz (2013-2016).

Julio César Chávez desglosó en conferencia de prensa que el ayuntamiento adeuda 35 millones de pesos a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, 45 millones de pesos al Instituto Mexicano del Seguro Social y 5 millones a la Universidad Autónoma de Zacatecas, así como parte de lo retenido por impuesto predial.

Chávez Padilla encontró que Enrique Flores dejó una deuda de 3 millones de pesos por el ‘‘proyecto arquitectónico’’ de un monumento a la Virgen de Guadalupe de 60 metros de altura en la cúspide del cerro San Simón, y compromisos de corto plazo con acreedores locales por más de 5 millones de pesos.

La carga más onerosa es un pasivo no circulante con Bansí –institución de banca múltiple con sede en Guadalajara, Jalisco– por 169 millones de pesos. Además, el municipio de Guadalupe debe cubrir en nueve años 394 millones de pesos de un fideicomiso para la ‘‘modernización del alumbrado público’’.

Entre adeudos, cargos y actualizaciones, el municipio de Guadalupe debe más de 688 millones 300 mil pesos, advirtió Julio César Chávez.

Saúl Monreal Ávila, nuevo alcalde de Fresnillo –el tercero de su familia en ser alcalde de su municipio natal–, reconoció que ya se detectaron ‘‘excesos’’ en la tesorería.

El edil priísta saliente de Fresnillo, José Haro de la Torre –acusó Saúl Monreal–, dejó una deuda de más de 130 millones de pesos.

En la capital de Zacatecas, Ulises Mejía –hijo de Antonio Mejía Haro, titular de la Secretaría del Campo en el gobierno de Amalia García Medina (2004-2010) y ex candidato perredista a la gubernatura–, recibió de la priísta Judith Guerrero López un pasivo de más de 80 millones de pesos.