El contenedor, en Guadalajara
Autoridades niegan riesgo sanitario; construyen crematorio y panteón
Lunes 17 de septiembre de 2018, p. 40
Guadalajara, Jal., Organizaciones de familiares de personas desaparecidas en Jalisco y la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDHJ) exigieron a la administración que encabeza el gobernador priísta Aristóteles Sandoval que informe y aclare por qué un tráiler, en el que se presume que hay al menos 150 cadáveres de personas asesinadas a quienes no se ha identificado, pasó por los municipios de Tlaquepaque y Tlajomulco y finalmente llegó a una bodega cercana a las oficinas centrales de la Fiscalía General del Estado (FGE) en Guadalajara.
La CEDHJ inició al menos un acta de investigación que involucraría a funcionarios municipales, estatales y del sector salud. El presidente de la comisión, Alfonso Hernández, dijo que ‘‘es evidente’’ el mal manejo de los cadáveres y que se requiere más presupuesto ante el problema de las desapariciones forzadas y la insuficiencia de lugares para resguardar cuerpos ante la oleada de violencia.
‘‘Tenemos el mejor instituto de ciencias forenses del país y pese a ello vemos estas situaciones. No quiero imaginar lo que ocurre en otros estados. Lo que queda muy claro es la necesidad de mayor respaldo económico, de recursos humanos y tecnológicos’’, agregó.
Organizaciones de parientes de personas desaparecidas, entre ellas Fundej y Por Amor a Ellxs, condenaron el trato indigno a los cadáveres y exigieron a las autoridades una explicación detallada.
El trajinar de los cuerpos se inició la semana pasada, cuando ante la insuficiencia de espacio en el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF) ubicado en Tonalá, la FGE rentó una bodega en la colonia La Duraznera de Tlaquepaque, adonde envió la caja refrigerada con decenas de cadáveres que no cabían en los 270 compartimentos con que cuenta el instituto.
Vecinos y comerciantes se quejaron en el ayuntamiento y la alcaldesa, María Elena Limón, solicitó al gobierno estatal sacar los cuerpos a más tardar en 48 horas, pues la bodega no contaba con permisos para resguardarlos en condiciones sanitarias y humanas adecuadas.
El 14 de septiembre, antes de que venciera el plazo de la alcaldesa, la FGE se llevó el tráiler a un predio baldío en Tlajomulco, a un lado de la colonia Paseos del Valle, donde los vecinos se quejaron por la fetidez que despedía el vehículo.
El sábado 15 de septiembre, la FGE llevó la caja refrigerada a la calle 18 de la zona industrial de Guadalajara, donde permanece, supuestamente en espera de que el gobierno estatal termine de edificar, en noviembre, el Campo Experimental Forense en la colonia El Vado de Tonalá, que será en realidad un panteón y crematorio para cadáveres sin identificar. En su primera etapa tendrá espacio para unos 700 cuerpos, pero vecinos ya se manifestaron en contra.
El director del IJCF, Octavio Cotero, dijo ayer que los traslados no representaron peligro para la población, mientras la FGE sólo reconoció que transporta ‘‘más de 100 cuerpos’’.
Desde agosto se han reportado más de mil 500 homicidios en Jalisco. La noche y madrugada de festejos patrios ocho personas fueron asesinadas en la entidad, y otra murió en forma violenta ayer en Tlaquepaque.