Como premonición o ironía del destino ante su anunciada disolución, el Estado Mayor Presidencial (EMP) confinó en 2014 en una cápsula del tiempo –para abrirse en 2064– 118 artículos que incluyen desde una toalla utilizada por el Presidente de la República hasta un legajo con las frases del titular de esa agrupación, general Roberto Miranda Moreno, así como uniformes, cartuchos y reglamentos, entre otros objetos.

Cuando nada en el horizonte inmediato ponía en duda su presencia, el 26 de febrero de ese año en el marco de la segunda conmemoración del Día del Estado Mayor Presidencial, se depositó la urna fabricada con lámina de acero inoxidable en la explanada Molino del Rey, donde el EMP tiene su cuartel.

El presidente Enrique Peña Nieto fue testigo en esa ceremonia con la cual el EMP depositó la cápsula en compartimientos de concretos empotrados al ras del piso, como legado a las generaciones futuras.

Contra la costumbre de sus dos inmediatos antecesores, los generales Armando Tamayo Casillas (2000-2006) y Jesús Castillo Cabrera (2006-2012) de dejar testimonio de su quehacer hacia el final de cada gestión, el general Miranda editó en 2016 un lujoso libro de pasta dura, en papel couché de alto gramaje, de 30 centímetros de largo, 422 páginas más algunos encartes.

Con el título Estado Mayor Presidencial: Evolución de una tradición de honor y lealtad, el impreso –de cuyo texto el propio jefe de este cuerpo técnico-militar se acredita como autor– se editó con la Secretaría de Cultura y se tiraron mil ejemplares, más sobrantes para reposición, según consigna el colofón.

Sin embargo, en la información de la Impresora y Encuadernadora Progreso, SA, responsable del trabajo, se ubica como cliente del libro la Dirección General de Publicaciones de la Secretaría de Cultura y se reporta un tiraje de 3 mil ejemplares entre abril y junio de 2016.

Es profuso en fotografías –alrededor de 30 sólo en el capítulo de la actual gestión– en las que el general Miranda se encuentra solo o acompaña a Peña Nieto en diversas ceremonias oficiales y del propio EMP, sin faltar otras donde trota a su lado en la Carrera Molino del Rey, organizada cada año.

Con un prólogo del propio presidente Peña en el que establece que desde que existe en México un sistema presidencial, en el siglo XIX, el Ejecutivo Federal ha requerido de protección y apoyo para realizar sus actividades al servicio de la patria; apunta también que el EMP se ha convertido en una organización vital de la democracia de nuestro país al afirmar su lealtad al mandatario electo por la voluntad mayoritaria de la sociedad mexicana.

El propio general Miranda ha señalado hace poco que el EMP respetará las indicaciones del alto mando sobre su existencia y en el libro se resalta en el prólogo su papel testimonial en las fases históricas más importantes del país.

De mantenerse la decisión del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, este cuerpo militar será testigo de una página inédita: su propia desaparición.