La indignación viajó en Metro, Metrobús o tomó las principales vialidades de esta capítal.

Estelas de jóvenes con pancartas, mantas o consignas cuestionando el porrismo en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) se veían avanzar desde los cuatro puntos cardinales de Ciudad de México con un mismo destino: la Rectoría de la máxima casa de estudios.

Desde temprana hora, fueron ellos, los estudiantes, quienes respondieron así, con grandes grupos, a la convocatoria emitida un día antes para exigir la salida de los porros de la institución.

Desde las lejanas facultades de Estudios Superiores Zaragoza, Cuautitlán o Acatlán (en Naucalpan), hasta los procedentes de otros estados, como el de Morelos, o bien los alumnos de las preparatorias 5 (Coyoacán), 4 (Miguel Hidalgo) o 9 (Gustavo A. Madero), entre muchas otras instituciones universitarias, fueron saturando poco a poco el transporte público de esta capital.

A ellos se sumaron contingentes de alumnos y profesores del Instituto Politécnico Nacional, las universidades Autónoma Metropolitana y Autónoma de Ciudad de México, así como varias escuelas, entre ellas la de Periodismo Carlos Septién García.

Las autoridades de la Secretaría de Seguridad Pública de Ciudad de México, del Sistema de Transporte Colectivo Metro, del Sistema Metrobús y M1 (antes RTP) desplegaron operativos para brindar facilidades a los estudiantes en su trayecto hacia el campus de Ciudad Universitaria.

En las distintas líneas del Metro los jóvenes tuvieron acceso gratuito. El reporte del STC detalla que las estaciones que reportaron mayores concentraciones estudiantiles fueron Canal de San Juan y Guelatao (Línea-A), con 800 y 500 estudiantes, respectivamente, quienes ingresaron por la mañana; Nezahualcóyotl (L-B), 500 personas; Autobuses del Norte (L-5), 500; Tacubaya (L-9), 400; Eje Central (L-12), 300, e Hidalgo, 300.

Pero fue la estación Universidad, de la Línea 3, la que captó la mayor cantidad de jóvenes que buscaban llegar a la concentración, antes de las 13 horas, en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales para marchar hacia las oficinas de Rectoría.

Un caso similar se observó en la Línea 1 del Metrobús, que corre de Indios Verdes hasta El Caminero, pues todas las estaciones se vieron colmadas durante varias horas por jóvenes cuya tolerancia hacia el porrismo llegó ayer al límite.

No quedaron atrás las unidades del transporte público cuyo destino eran las estaciones Universidad, Miguel Ángel de Quevedo, Copilco y otras, que durante la mañana llegaban con decenas de manifestantes.

Algunos alumnos optaron por llegar caminando y avanzaron sobre vialidades primarias como la avenida de los Insurgentes, Periférico, Eje Central o Miguel Ángel de Quevedo, y para quienes la policía desplegó un operativo de seguridad y vialidad por medio de las cámaras del Centro de Atención a Emergencias y Protección Ciudadana.