Jueves 6 de septiembre de 2018, p. 31
Nueva York. China, Rusia y Bolivia exigieron este martes respeto a la soberanía de todos los países, durante un inusual debate en el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre la situación en Nicaragua, realizado a iniciativa de Estados Unidos, que acusó que la nación centroamericana se convirtió en un Estado fallido, corrupto y dictatorial
.
La embajadora estadunidense Nikki Haley, aprovechó que este mes Washington preside el Consejo de Seguridad para convocar una sesión informativa que discutió la situación en Nicaragua
, algo inusual en el órgano ejecutivo de la ONU, cuya función es atender las amenazas a la paz y la seguridad en el mundo.
Cada día que pasa Nicaragua avanza por la senda de Siria y Venezuela, ambos marcados por el éxodo
de sus ciudadanos, aseveró Haley, al referirse a la crisis desatada desde abril con las protestas contra el gobierno de Daniel Ortega, que han provocado al menos 320 muertos y unos 2 mil heridos.
Haley dijo que desde el estallido de las manifestaciones el gobierno de Ortega sometió a su pueblo a detenciones arbitrarias, tortura y ejecuciones extrajudiciales.
La reunión se desarrolló sin el consenso de los 15 integrantes del Consejo. Un voto de procedimiento que lograra la oposición de nueve miembros podría haber hecho desistir a Estados Unidos de discutir el tema, pero no fue solicitado.
Alineados con Estados Unidos estuvieron Costa Rica, Perú, Francia, Gran Bretaña, Holanda, Suecia y Costa de Marfil, que deploraron la decisión de Ortega de expulsar a la misión del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU, tras un contundente informe sobre la represión en el país.
Rusia, China y Bolivia rechazaron la iniciativa estadunidense, así como Nicaragua y Venezuela, que participaron como invitados. Kuwait, Kazajistán, Etiopía y Guinea Ecuatorial también expresaron su oposición.
Nicaragua exige el cese de toda política injerencista que viole el derecho internacional
, expresó el canciller nicaragüense, Denis Moncada.
Existe consenso en este Consejo de Seguridad en que Nicaragua no representa una amenaza a la paz y la seguridad internacionales. Por tanto, su inclusión en esta reunión es una clara violación a la Carta de Naciones Unidas y del Derecho Internacional
, añadió Moncada.
Wu Haitao, representante permanente adjunto de China ante la ONU, aseveró que la situación en Nicaragua no constituye una amenaza para la paz internacional y que el Consejo de Seguridad no debería involucrarse.