¿Quién está detrás de la violencia en la UNAM? // El pago de contribuciones se basará en la confianza // Curules en barata
UNAM: protesta en paz // A 50 años de Tlatelolco // Porros y burocracia arribista // ¿Escucharán a los estudiantes?
Herencia petrolera devastadora // Gasolina importada: 1.5 billones
Realidad e ilusión // Luna busca lavarse la cara // ¿Dónde está la diferencia por la que votamos?
l Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) analizó ayer la situación de Nicaragua, conmocionada por una ola de descontento social en contra del gobierno del presidente Daniel Ortega Saavedra y por la injustificable política represiva de las autoridades que se ha cobrado ya decenas de muertos en ataques de cuerpos parapoliciales adeptos al régimen a las abundantes manifestaciones que se llevan a cabo en las principales ciudades del país centroamericano.
Se pronuncian contra la violencia en la UNAM
l principal encargo social de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) es formar en términos académicos y ciudadanos a los jóvenes que acceden a la institución. El ataque reciente perpetrado por un violento grupo pandilleril en contra de quienes no hacían sino ejercer el derecho a manifestarse, es absolutamente reprobable y contrario a los valores universitarios de diálogo y respeto.
l Senado es portador, junto con otros atributos legales y políticos, de dos principales funciones constitucionales: representa la unión federalista de los estados de la República, es decir, encarna el Pacto Federal, y da cauce a las relaciones internacionales de México, las cuales dirige y encabeza el Presidente de la Nación. Y esas dos virtudes son igual de poderosas, desde que el Senado fue instaurado. De ahí que, más allá de otras consideraciones, como es la de ser cámara revisora, junto con la de Diputados, tiene asignadas muchas y muy importantes funciones republicanas, a las cuales la sociedad le asigna siempre un gran peso.
omo muchos profesores de asignatura del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) podemos vivir con salarios miserables, listas jerarquizadas –verdaderas luchas encarnizadas– para obtener el mínimo necesario para subsistir jodidamente; aceptar que nuestros alumnos tengan que sentarse en el piso de aulas en las que ya no cabe nada. Como docentes sabemos que es antipedagógico que existan grupos mayores a 30 alumnos, pero más cuando damos clase a 50 o hasta 60 alumnos; que debemos cubrir un programa diseñado desde un escritorio burocrático que plantea la nueva charada
institucional en el poder, demasiado alejado de la práctica en el aula y las necesidades de los egresados.
obiernos gemelos, los de Argentina y Brasil, siguieron los mismos guiones. Superar a gobiernos populistas, que habían hecho a sus países gastar más de lo que podían –Vivir arriba de sus posibilidades
, como les gusta repetir–, restablecer el equilibrio en las cuentas públicas, controlar la inflación. Y listo, las economías retomarían sus cauces normales, orientadas por los equilibrios mágicos del mercado.
no de los cinco grandes problemas de la gobernanza global que se discuten en La ineficiencia de la desigualdad, el más reciente informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), es el tránsito transfronterizo de seres humanos –movido por lo que en México se ha denominado la fatalidad de la emigración
, así como por la búsqueda, en muchas ocasiones desesperada, de asilo, refugio y seguridad.
l 2 de septiembre de 2000 la Rayuela de La Jornada decía: Si el país está tan bien, ¿por qué perdieron las elecciones?
Lo mismo podría decirse del sexto informe de Peña Nieto. La respuesta, sobre todo en relación al último sexenio priísta, sería más o menos la misma: el país no está bien y hay mucho por hacer para recuperarlo y recomponer los pedazos que han dejado los gobiernos neoliberales desde Miguel de la Madrid hasta hoy. En aquella ocasión, hace 18 años, correspondió al diputado perredista Martí Batres fijar las posiciones de su partido en esa sesión de la legislatura recién inaugurada, y “convocó a los demás grupos parlamentarios a ‘asumir con valentía el reto de la política económica, a rechazar el dogma fundamentalista neoliberal, a distribuir la riqueza, a terminar con el sacrificio eterno del pueblo’.”
ecientemente, Cepal publicó un trabajo titulado La ineficiencia de la desigualdad, en el que insiste sobre una tesis central sostenida a lo largo de sus años de vida: la de-sigualdad es no sólo injusta, sino ineficiente: es un obstáculo al desarrollo y a la consecución de la sostenibilidad. Cepal plantea que en América Latina el tema distributivo mejoró en el decenio anterior, pero se estancó en los años recientes, debido directamente a la disminución del ritmo de crecimiento, que entre 2012 y 2017 fue en la región de 2.3 por ciento en promedio, lo que contrasta con 3.8 por ciento de los años anteriores. Lograr avanzar en un camino de mayor igualdad no es únicamente un imperativo ético, es condición necesaria para acelerar el crecimiento de la productividad, la creación de riqueza y, por ello, lograr el desarrollo.
a guerra contra Venezuela continúa por todos las vías. El miércoles 5 se desarrollaba una reunión del Consejo Permanente (CP) de la pestilente OEA con el fin de tratar lo que llama la crisis migratoria en ese país. Venezuela, el tema que obsesiona al fantoche Luis Almagro, secretario general del organismo, y a otros de los miembros del obsecuente Grupo de Lima (GL), como si no hubiera tantos apremiantes problemas sin solución en América Latina y el Caribe. En los países del GL decenas y decenas de millones pasan hambre, sufren analfabetismo, se ven forzados a emigrar, son víctimas de una crisis de salud pública de grandes proporciones, los jóvenes –sin educación ni trabajo digno– carecen de toda esperanza, flagelos agravados escandalosamente por el modelo neoliberal. Pero eso no preocupa a la OEA ni a los gobiernos del GL.
a llegó ese momento del año en que terminan las vacaciones veraniegas en Norteamérica, comienza la temporada del futbol americano profesional y, por supuesto, empieza el de cine más imponente, así como mejor organizado del continente americano. En su 43 edición, el festival de Toronto ofrecerá 255 largometrajes en representación de 74 países. Y de ellos, 33 por ciento son películas dirigidas por mujeres. O sea que aunque uno se propusiera ver sólo cine femenino, no le alcanzaría el tiempo. De ese tamaño son las frustraciones del llamado TIFF.