A pesar de que la tortuga amarilla está en riesgo de extinción, el Programa de Ordenamiento Ecológico Marino y Regional del Pacífico Norte, que incluye a la península de Baja California, permitirá capturar hasta 200 ejemplares en el golfo de Ulloa, advirtió Alejandro Olivera, representante en México del Centro para la Diversidad Biológica.

En el programa publicado el pasado 9 de agosto en el Diario Oficial de la Federación se establece que entre mayo y agosto, en el aprovechamiento pesquero o actividades realizadas por el hombre, podrá producirse la muerte incidental de hasta esa cifra de ejemplares. Una mortalidad mayor a 200 individuos al año de tortuga amarilla se traduce en un nivel de riesgo inaceptable para la viabilidad de la especie a largo plazo, señala.

Con esto, dijo Olivera, prácticamente se legaliza su muerte, se establece una cuota de hasta donde se debe matar tortugas cuando esta prohibido por la ley. A zonas como el golfo de Ulloa arriban las tortugas de las especie amarilla y la caguama. Explicó que según la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), que publicó el ordenamiento, no se afectaría la población, lo cual va contra la legislación en la materia.

En entrevista detalló que otros instrumentos, como el refugio pesquero de Conapesca, dice que no se deben rebasar 90 tortugas, pero aún así malamente dan cuotas y sobre todo una dependencia que se encarga de regular especies de interés comercial, no debe fijar límites de captura incidental.

Este ordenamiento ecológico también se refiere a la minería subterránea y no podría volver a presentarse el proyecto Don Diego, cerca del golfo de Ulloa, consideró Olivera. Esto porque se tendría que volver a presentar una manifestación de impacto ambiental y los criterios que se establecen difícilmente permitirían su establecimiento sin que se afectara la integralidad de los ecosistemas y de las tortugas marinas. La Semarnat, recordó, ya negó la autorización ambiental en dos ocasiones al proyecto.

De acuerdo con el programa de ordenamiento ecológico, la región Pacífico Norte se caracteriza por ser una zona de transición entre las regiones marinas templadas y tropicales, producto del encuentro de los grandes sistemas globales de corrientes marinas como la subártica, la corriente de California y la norecuatorial. Éstas contribuyen a mantener zonas de alta productividad primaria y favorecen la reproducción de especies de importancia comercial, aves marinas, tortugas marinas y la ballena gris.