Lucran con la desgracia: Rosita Santiago
Perdió a su esposo y una hija; al vástago que sobrevivió el mandatario ofreció beca hasta nivel universitario
Martes 4 de septiembre de 2018, p. 28
Santa María Xadani, Oax., La noche del 7 de septiembre de 2017, la vida de Rosita Santiago cambió por completo: el terremoto de magnitud 8.2 destruyó su vivienda y causó las muertes de su esposo e hija. Días después del sismo, el presidente Enrique Peña Nieto hizo un recorrido de supervisión en el istmo de Tehuantepec y le prometió que la apoyaría con una beca educativa para su hijo, que sobrevivió a la tragedia.
El mandatario no cumplió. Rosita, de 33 años de edad, originaria de la comunidad zapoteca Santa María Xadani, dice estar decepcionada de las autoridades.
La casa de Rosita era de dos pisos y todo colapsó. No recuerda cómo saltó y llegó al primer piso, donde se mantuvo a salvo de las paredes y los muros que caían. Sólo recuerda que gritaba muy fuerte los nombres de sus hijos y su esposo, pero no pudo hacer nada. Él y su hija de nueve años perdieron la vida, mientras su hijo Jesús Guerra Santiago sobrevivió, pero con secuelas de un tobillo lastimado.
El presidente Peña Nieto llegó a mi casa a los pocos días del terremoto acompañado de muchas personas y lamentó mi padecer; me dijo que ya no podría regresarme a mi esposo e hija pero sí me ayudaría a levantar mi casa, además de que me prometió una beca educativa hasta la universidad para mi hijo, pero parece que se le olvidó, yo no pido casa ni muebles, que todo perdí; lo único que deseo es que me apoyen para que mi hijo estudie y sea un gran profesionista, que termine su carrera, ese es mi único sueño que me mantiene viva.
Las cosas no han sido fáciles. De ama de casa, Rosita pasó a ser comerciante y hoy administra una tortillería que su esposo heredó de sus padres, pero no le alcanza y teme no cumplir con el anhelo de su hijo.
A causa del terremoto de magnitud 8.2, 79 personas perdieron la vida en la entidad, la más alta cifra de víctimas por un movimiento telúrico en Oaxaca.
En Santa María Xadani sólo fallecieron dos: Orlando Arturo Guerra Jiménez y su hija Ajelet Yeshua Guerra Santiago, esposo e hija de Rosita. Si bien obtuvo una vivienda por conducto del gobierno federal, Rosita se quedó sola a causa del terremoto, pero por fortuna tengo manos y saldremos adelante, ya no creo en las promesas de los políticos
. Destacó que no rogará el apoyo que Peña Nieto le prometió, y la decepciona que los funcionarios lucren con las desgracias, prometan y olviden.
Tengo el apoyo de mi gente, el pueblo de Xadani y organizaciones sociales me han apoyado. De las autoridades no puedo decir mucho, el presidente municipal me apoyó con 5 mil pesos para el entierro, pero de ahí todo ha sido ayuda social; sin embargo, lucharé por que mi hijo concluya su carrera universitaria, no sé cómo le voy a hacer, pero lo lograré porque ese compromiso lo tengo con mi esposo, que aunque ya murió sigue con nosotros.
