Es un golpe a la capacidad de la comisión, afirma Valentina Peralta, de la Red Eslabones por los Derechos Humanos
Lunes 3 de septiembre de 2018, p. 12
Pese a que el gobierno saliente se había comprometido a dar el más alto estatus legal a la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas (CNBP) –al nivel de un organismo descentralizado–, dicha entidad podría quedar sólo como una unidad administrativa, lo cual limitaría seriamente los recursos económicos y humanos con los que contaría, advirtió Valentina Peralta, coordinadora de la Red Eslabones por los Derechos Humanos.
En entrevista con La Jornada, la luchadora social recordó que la degradación de uno de los organismos principales que dependen de la Ley General en Materia de Desaparición Forzada supone un golpe muy preocupante a su capacidad, lo que afectaría en primer lugar a los familiares de las víctimas de este delito.
Cuando se estaban discutiendo los términos de la mencionada ley, se acordó que la CNBP tendría casi un nivel de secretaría de Estado, pues sólo le iba a reportar sus avances a (la Secretaría de) Gobernación, pero ahora la están bajando absolutamente de nivel y eso limitará cuestiones tan tangibles como los sueldos que pueda ofrecer, por ejemplo
.
De acuerdo con Peralta, la funcionaria que en este momento podría incidir más para evitar que la comisión de búsqueda quede con un menor rango es la titular de la Secretaría de la Función Pública, Arely Gómez González, quien conoce las implicaciones legales de dejar al organismo como una simple unidad administrativa.
Este gobierno ya va de salida, ¿para qué quieren dejarle a la próxima administración una CNBP inoperante, que no pueda dar el ancho con el trabajo?, ¿para dejarla mal o impedir que haga algo que no se logró en el sexenio anterior? El gobierno entrante debe saber que les están entregando un elefante blanco, y exigir que les den una comisión con estatus alto
, subrayó la activista.
Lo anterior, dijo Peralta, se suma a la falta de coordinación entre la CNBP y la Procuraduría General de la República (PGR), organismo que está siendo omiso en sus labores de búsqueda de desaparecidos, con el argumento de que ese trabajo no le corresponde, sino a la comisión especializada en el tema, a sabiendas de que ésta aún no termina de conformarse.
No se puede investigar una desaparición sin hacer trabajo de búsqueda y localización, y tampoco se puede buscar sin que esas acciones den indicios que impactan en la investigación (sobre los responsables). Son las dos piernas para dar con los miles de desaparecidos, pero se les están encomendando a dos espacios y dos jefes diferentes
, lo cual deja a las víctimas en un estado total de indefensión, señaló Peralta.