Los gobernadores del país expresaron ayer todo su respaldo, sin titubeos, a Andrés Manuel López Obrador, para que el primero de diciembre inicie su mandato con toda la fuerza.

Además, en la reunión de ayer con la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), el presidente electo instruyó a Carlos Urzúa, quien será secretario de Hacienda, para que se reúna con los gobernadores, con el objetivo de que le presenten sus prioridades para el Presupuesto de Egresos 2019.

Los gobernadores le plantearon, asimismo, que extienda al resto del país su decisión de reducir la tasas del impuesto al valor agregado, medida que anunció sólo para los estados de la frontera norte.

López Obrador les informó que en sus giras por los estados, a partir del 16 de septiembre, tendrá reuniones bilaterales con cada uno, e incluso les pidió realizar también las reuniones matutinas para revisar el estatus de la seguridad en el país.

El compromiso con el presidente electo comenzó con un documento de los 14 gobernadores surgidos del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que leyó el mandatario de Guerrero, Héctor Astudillo, donde se comprometen a trabajar con el presidente electo por los mexicanos, porque es nuestra convicción que si al Ejecutivo federal le va bien, a México le va bien.

El gobernador de Chiapas, Manuel Velasco, presentó las conclusiones del encuentro. Explicó que se acordó respaldar los 25 programas y proyectos prioritarios de la siguiente administración. También el apoyo firme y sin titubeos a López Obrador en responsabilidades sensibles, como la nueva estrategia de seguridad, y participar en la consulta sobre el Nuevo Aeropuerto Internacional de Ciudad de México; e impulsar el programa de austeridad republicana.

Informó que otro de los compromisos es no generar duplicidad de los programas. Habrá coordinación en obras públicas y se definió que lo prioritario es concluir las obras en proceso, hospitales, carreteras, caminos y el tren México-Toluca.

En su documento, los gobernadores priístas plantearon que el gasto público tenga un enfoque social, y que las prioridades sean en educación, salud y combate a la pobreza. Respaldamos una visión social incluyente. No obstante, para que los beneficios sean sostenibles en el presupuesto es importante definir con claridad las fuentes de financiamiento y conocer qué implicaciones tiene para los distintos fondos.