El suizo es el creador del monstruo de la cinta Allien, entre otros
Domingo 12 de agosto de 2018, p. 8
El artista suizo Hans Ruedi Giger, considerado el artífice de la biomecánica, tendrá un espacio en el Festival Internacional Cervantino (FIC), en octubre, en Guanajuato.
Giger fue un creador que no sólo ganó fama por sagas de películas como Alien y Species, sino que llevó al mundo a una realidad en la cual la tecnología se funde con la biología para producir biomecánica, estilo que desarrolla criaturas híbridas y paisajes oníricos que sirvieron de inspiración para películas de ciencia-ficción, hace ya una treintena de años.
Su influencia no solamente fue en la industria cinematográfica, pues también abarcó el ámbito de los cómics, los videojuegos y puso de moda los tatuajes.
Fue criticado por utilizar el aerógrafo, señaló César Oropeza, quien será curador de la exposición que se montará en Guanajuato, según anunció en una conferencia por Skype desde Valencia, España.
Giger falleció en 2012. Nació en el pequeño poblado suizo de Coira, y tras una niñez marcada por un febril imaginación que lo llevaba a zonas oscuras, en las que florecían pesadillas y temores nocturnos; se mudó a Zurich, donde estudió diseño industrial en la Escuela de Artes Aplicadas y comenzó a publicar el trabajo que le daría notoriedad, Atomikinder, dibujos en tinta que aparecen en revistas alternativas .
Con una vida de viscisitudes, que incluye el suicidio de su esposa Li Tober, actriz a quien conoce en casa de Paul Weibe, Giger, mantiene su veta creadora. Paulatinamente se vuelve más popular y publica un compendio de sus imágenes Necronomicón, el cual llega a manos de Ridley Scott, quien lo contrata para hacer el monstruo de la cinta Alien.
El personaje lo catapulta a la fama mundial y participa en Poltergeist 2 y Species. Además, colabora con bandas de rock como Korn, Dead Kennedys y Deborah Harry.
Oropeza considera que el trabajo de Geiger, quien fue un apasionado lector de ciencia-ficción, es una reflexión visual; no es evasión de la realidad, asegura, sino conexión íntima con lo que ocurre: es arte fantástico conectado con la realidad.
Oropeza, quien conoció la obra de Giger cuando difícilmente se podían adquirir algunos costosos libros del creador en la Zona Rosa, se especializó en los trabajos del artista suizo y actualmente se dedica a la docencia en el campo del diseño gráfico.
La exposición HR Giger, el genio del futuro, se montará en la sala polivalente de la Universidad de Guanajuato, en donde, como explica Oropeza, lo orgánico parece fundirse con lo cibernético.