Insuficientes medidas oficiales
Exige que instancias federales informen sobre acciones y ejercicio del presupuesto para proteger a esta especie
Jueves 2 de agosto de 2018, p. 36
El gobierno mexicano sería responsable de violar garantías por no lograr la conservación de la vaquita marina, especie en riesgo de extinción que reside únicamente en el Alto Golfo de California, señaló Greenpeace en una queja que presentó ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH). Antes de que concluya el sexenio, las autoridades deben rendir cuentas sobre el desarrollo y ejecución de estrategias y acciones, así como del ejercicio del presupuesto público destinado para la protección de esta especie.
La organización también exhortó a la administración entrante a que, en el manejo integral de zonas costeras y marinas, ponga énfasis en establecer los términos y condiciones bajo los cuales se atenderá la situación de la vaquita marina en el Alto Golfo de California.
En la queja, Greenpeace señaló que ha habido omisiones en la protección, conservación y recuperación de la vaquita marina por parte de los titulares de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, así como de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas; también de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente; de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca, y del Instituto Nacional de Pesca y Acuacultura.
En un comunicado, la agrupación argumentó que falta coordinación entre las instituciones y se evaden responsabilidades para cumplir con lo que mandatan varias leyes nacionales y tratados internacionales en materia de preservación de la biodiversidad y otros derechos. Estas omisiones llevaron a que en sólo 20 años la especie pasara de 567 a 30 ejemplares de vaquita marina que sobrevivían al menos hasta 2016. Durante la administración federal actual se dio una caída de más de 70 por ciento en el número de ejemplares desde 2015.
Las medidas emprendidas por el gobierno para salvar a la vaquita marina han sido insuficientes, a pesar de que ésta se encuentra enlistada en la NOM-059-SEMARNAT-2010, y en la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres como especie en peligro de extinción, así como en la lista roja de las que están en peligro crítico de extinción por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
De acuerdo con Greenpeace, las instituciones violaron los derechos a un medio ambiente sano para el desarrollo y bienestar de las personas; a un desarrollo sustentable; a que se preserve y se restaure el equilibrio ecológico; a que se conserven los elementos naturales; a la conservación de la diversidad biológica por su valor intrínseco y por su importancia para la evolución, y para el mantenimiento de los sistemas necesarios para vida de la biosfera.