Tras el hallazgo de armas de fuego, así como pancartas en las que se culpa a elementos de la Secretaría de Marina-Armada de México (Semar) de la desaparición de personas en Nuevo Laredo, Tamaulipas, la Procuraduría General de la República (PGR) inició una carpeta de investigación.

Militares localizaron un domicilio en la colonia Benito Juárez de esa ciudad, donde había 137 pancartas en las que son atribuidas desapariciones a los marinos; en ese domicilio se incautaron 11 armas de fuego largas y cinco cortas, una de postas, cartuchos, cargadores y documentación diversa.

Uso de uniformes apócrifos para delinquir

Fue la Fiscalía Especializada en Investigación de los Delitos de Desaparición Forzada la instancia que atrajo la indagatoria, luego de que en Nuevo Laredo se ha dado la desaparición de personas en las que se inculpa a los marinos; no obstante que, de acuerdo con las investigaciones, integrantes del crimen organizado utilizan uniformes apócrifos para delinquir.

A raíz de los hechos, el Ministerio Público de la delegación, adscrito a la delegación de la PGR en Tamaulipas, inició una carpeta de investigación por la probable violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos contra quien resulte responsable; sin embargo, derivado del hallazgo de las pancartas, la Fiscalía Especializada en Investigación de los Delitos de Desaparición Forzada atrajo la indagatoria, agregó.

Lo incautado forma parte de la pesquisa de la PGR por la desaparición de 36 personas entre febrero y mayo, de las cuales nueve ya fueron localizadas muertas y una con vida.

La fiscalía ha realizado más de 150 diligencias. Una de las líneas de investigación es que integrantes del cártel del Noreste utiliza uniformes apócrifos de la Marina para cometer las desapariciones.

Dicha organización, que encabeza Juan Gerardo Treviño Chávez El Huevo Treviño, sobrino de Miguel Ángel Treviño Morales El Z-40, ha atacado en dos ocasiones a los elementos de la Procuraduría que investigan el paradero de las 36 personas.

En el primer ataque, ocurrido el 9 de julio, el personal de la fiscalía salía de la base naval en Nuevo Laredo cuando fue interceptada por el grupo criminal.

El segundo ataque tuvo lugar el 12 de junio contra cuatro agentes del Ministerio Público y ocho policías federales ministeriales.