La producción de gasolina en el país ha disminuido 45 por ciento en lo que va del sexenio y la dependencia a los combustibles importados, principalmente de Estados Unidos, subió de 4.5 a 7 de cada 10 litros que se consumen en el mercado nacional, indican cifras de Petróleos Mexicanos (Pemex).

De acuerdo con reportes financieros de la empresa, en el primer trimestre de 2013, año en el que inició la actual administración, el sistema nacional de refinación produjo un promedio de 425 mil barriles diarios de gasolinas, que alcanzaron para satisfacer más de la mitad (54.6 por ciento) del consumo nacional en dicho periodo (778 mil barriles diarios).

Al segundo trimestre de 2018, la producción de gasolinas promedió 235 mil barriles diarios, los cuales apenas alcanzaron para cubrir el 30 por ciento de la demanda nacional de combustibles, que fue de 784 mil barriles diarios.

Así, las importaciones de gasolina pasaron de 353 mil a 549 mil barriles diarios, un incremento de 55 por ciento en los poco menos de seis años que lleva el actual gobierno.

El reporte de Pemex señala que entre abril y junio de este año el proceso total de petróleo crudo del sistema nacional de refinación bajó 22 por ciento respecto al mismo periodo de 2017 (de 905 a 704 mil barriles diarios).

Durante una conferencia telefónica este viernes con motivo de la presentación de los resultados financieros de la empresa  al segundo trimestre, el subdirector de comercialización de abasto de combustibles de Pemex Transformación Industrial, Jorge Martínez, dijo que lo anterior ocurrió debido a que las refinerías de Madero y Minatitlán concluyeron su programa general de mantenimiento y pasaron por un proceso de arranque de plantas.

La producción de 704 mil barriles diarios, registrada en el segundo trimestre de 2018, significa que las seis refinerías que existen en México están trabajando al 42 por ciento de su capacidad total de refinación, que es de un millón 640 mil barriles diarios.

Interrogado sobre las propuestas de la nueva administración de construir una o dos refinerías, el director corporativo de finanzas, David Ruelas, dijo que la empresa se ha centrado en el mantenimiento de las refinerías, tal y como lo estableció en su plan de negocios 2017-2021, presentado en noviembre de 2016.

El objetivo de los programas de mantenimiento es optimizar el proceso de crudo e incrementar la producción de refinados de mayor valor agregado. Estamos en un proceso de reconfiguración de la refinería de Tula y posteriormente se planea la reconfiguración de Salamanca y Salina Cruz, señaló.

Comentó que para la construcción de una nueva refinería deben realizarse los estudios de viabilidad técnica, económica y financiera.

Aunque sabemos cómo vienen las propuestas de la nueva administración es parte de lo que tendremos que discutir con el equipo de transición, con el que a la fecha no hemos tenido contacto, pues tenemos que ser respetuosos y cuidadosos de los tiempos legales para que se den estos pasos, dijo.