Antony, de 12 años, llegó al país la madrugada de ayer procedente de Nueva York, igual que otros 17 niños, para conocer el lugar donde nacieron sus padres, quienes por diversas necesidades tuvieron que migrar a Estados Unidos hace más de una década y no han podido regresar.

Él y sus compañeros se mantienen entre la felicidad y la tristeza, pues les emociona estar en México, pero al mismo tiempo lamentan que no estén sus progenitores.

Los niños participan en el primer encuentro Nueva York-Teopantlán, Puebla, iniciativa de asociaciones civiles y grupos de migrantes que tiene el objetivo de promover la unidad familiar, los derechos de este sector de la población y alzar la voz contra la separación forzada de familias y las políticas migratorias tanto de México como de Estados Unidos, que no brindan soluciones humanas, integrales y reales, dijo Atala Chávez, directora del Instituto de Investigación y Práctica Social y Cultural (Iipsoculta).

Antony platicó en entrevista que cuando su mamá escuchó que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, endurecería las políticas contra los indocumentados se puso triste; tenía miedo de que Migración fuera por ella.

Para él también ha sido difícil, porque yo no quiero perder a mi mamá sólo por una tontería. El presidente no me gusta, porque piensa que puede hacer todo, expresó.

Este sentimiento es compartido por otros niños y niñas hijos de migrantes. Diana Ramírez, de 11 años, dijo que en su familia se ha incrementado el temor de ser deportados. Hay lugares a los que no podemos ir, porque los policías van a regresarlos a México. Sin embargo, cuando se les preguntó sobre su estancia en el país, todos mostraron su emoción por abrazar a sus abuelos, primos y familia que tienen en Teopantlán, donde el día 24 realizarán la danza típica de las moras que sus padres les enseñaron.

Atala Chávez demandó a los gobiernos de México y Estados Unidos dejar de separar a las familias. Las leyes migratorias nos están dividiendo, segregando. Acusó que ninguna autoridad federal ni local los ayudó a traer a los niños al país. Puntualizó que los 17 menores regresarán a Nueva York el día 29.