Con la mira puesta en el cambio de administración, la calificadora Fitch Ratings aseguró ayer que el gobierno de México está altamente incentivado a apoyar a Petróleos Mexicanos (Pemex) “por las muy fuertes consecuencias sociales, políticas y financieras que el deterioro financiero de la compañía tendría para el país.

Una situación de dificultades financieras en Pemex tiene el potencial de interrumpir el suministro de combustibles líquidos en todo el país, lo que podría tener importantes consecuencias sociales y económicas para México, dijo la calificadora.

En un reporte divulgado este martes, la firma consideró que la petrolera seguirá enfrentando desafíos durante la administración que encabezará Andrés Manuel López Obrador, quien obtuvo el triunfo en la votación del domingo pasado, como ha ocurrido en administraciones anteriores.

La onerosa carga tributaria de Pemex sigue provocando deterioro en el perfil de crédito de la compañía y ha llevado a un aumento en la deuda total de la empresa, que pasó de 64 mil millones de dólares en 2013 a 106 mil millones en marzo de este año, añadió.

Aunque hasta ahora no ha sido planteado ese tema, la calificadora consideró pertinente analizar si la nueva administración debería reducir los impuestos que paga Pemex para que la carga tributaria de la compañía esté en línea con las prácticas internacionales, lo que a juicio de Fitch podría ayudar a estabilizar el perfil de crédito.

De acuerdo con la metodología de Fitch, a pesar de la fuerte vinculación entre Pemex y el gobierno federal, las calificaciones de la compañía podrían degradarse si su perfil crediticio se deteriora, aseguró.

Pemex está un tanto restringida ante los cambios bruscos en estrategia, resultado de mejoras recientes en el gobierno corporativo, derivados de la reforma energética, comentó. Por ley, el Presidente de México nombra a los 10 miembros del consejo de administración de la compañía, de los cuales cinco son independientes y ratificados por el Senado para plazos de cinco años escalonados.

Los comités de Auditoría y Recursos Humanos se componen de directivos independientes, mientras los de Estrategia y de Inversión y Adquisiciones están presididos por independientes. Esta estructura de gobierno corporativo ofrece cierto control y otorga algunos contrapesos en medio de los cambios en la estrategia, administración o decisiones de inversión. La ley de Pemex, que establece esas políticas de gobierno corporativo, puede ser cambiada por el Congreso con una aprobación de mayoría simple.

Empresas energéticas, con movimientos mixtos en bolsa

Ienova y Vista, empresas relacionadas con el sector de energía que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores, han registrado en las dos sesiones de esta semana resultados mixtos. La primera acumula un repunte de 0.40 por ciento, mientras la segunda no reporta cambio en su cotización, según información del mercado bursátil.

Mientras, los títulos de Grupo México y de Peñoles, del sector extractivo, registran retrocesos también en las dos jornadas bursátiles posteriores a la votación del domingo pasado, de 1.75 y 3.95 por ciento.