En la última jornada financiera antes de la elección presidencial, el peso completó este viernes la segunda semana al hilo en que logra recuperar valor frente a la divisa estadunidense. El mercado permanece más sensible a las incógnitas que plantea la relación comercial con Estados Unidos que al resultado de la votación del domingo.

Sin embargo, en el segundo trimestre del año, la moneda nacional acumuló una depreciación de 9.23 por ciento, el doble de la registrada en periodos comparables de las tres elecciones presidenciales previas.

Este viernes, el tipo de cambio para operaciones de mayoreo, las más representativas del mercado de divisas, se ubicó en 19.87 pesos por dólar, una depreciación de 17 centavos respecto al día previo, reportó el Banco de México. En las transacciones minoristas, cerró en 19.35 pesos por dólar a la compra y 20.15 pesos a la venta, de acuerdo con Banamex.

Con el cierre del viernes, el peso hiló su segunda semana de apreciación, al recuperar 0.89 por ciento en la cotización frente al dólar, a pesar de un contexto que continúa complicado para los mercados emergentes ante el riesgo de medidas comerciales proteccionistas de Estados Unidos, explicó el área de análisis de Banorte.

Ayer concluyó, en cuanto a operaciones financieras, el segundo trimestre del año. En este periodo, el peso acumuló una depreciación de 9.23 por ciento, equivalente a 1.68 pesos, respecto del nivel registrado al cierre de marzo.

La depreciación del peso durante el trimestre se debió, principalmente, al aplazamiento de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN); una mayor aversión al riesgo debido al endurecimiento de las políticas proteccionistas de Estados Unidos y las amenazas de ese país hacia la Unión Europea y China; la posibilidad de que la Reserva Federal de Estados Unidos suba su tasa de interés en cuatro ocasiones durante el año y al proceso electoral en México, explicó Gabriela Siller, directora de análisis de Banco Base.

Aunque el peso se depreció principalmente por la incertidumbre sobre el futuro del TLCAN, el desempeño del tipo de cambio fue en el mismo sentido y más acentuado al observado en otros años de elecciones presidenciales.

Durante las tres elecciones presidenciales previas (2000, 2006 y 2012), el peso perdió en promedio 4.96 por ciento durante el segundo trimestre, lo que se compara con una depreciación de 9.23 por ciento en el trimestre que concluye, dijo.

El desempeño del tipo de cambio a partir de la noche de este domingo dependerá de los resultados electorales. La confirmación del triunfo del candidato de izquierda podría llevar al tipo de cambio a oscilar entre 19.70 y 20.30 pesos por dólar, con la posibilidad de que el peso se aprecie gradualmente durante julio, siempre y cuando se confirme una oposición en el poder legislativo y si se repiten las estadísticas postelectorales de años atrás, consideró.