Aunque vino todavía no forma parte de la dieta de las familias mexicanas, poco a poco se incrementa su consumo en el país, aseguró a La Jornada Gabriel Padilla Maya, director general del Consejo Mexicano Vitivinícola, quien precisó que el consumo de este producto crece alrededor de 8 por ciento anual, impulsado principalmente por los jóvenes profesionistas y las mujeres.

Entrevistado en la muestra Nación de Vinos, destacó que la intención es ocupar, cada vez más, un mayor porcentaje del mercado nacional. Actualmente, los 2 mil 900 productores de vino nacional producen 2.1 millones de cajas de vino, lo que representa 29 por ciento de la participación en el mercado interno. Anualmente, en el país se demandan de 10 a 12 millones de cajas, lo que quiere decir que aún la mayor cantidad de vinos consumidos son de etiquetas extranjeras, principalmente de Chile, Argentina, Italia, Francia y España.

Padilla Maya detalló que en los últimos años el consumo anual per cápita se ha incrementado de manera constante. En 2002 era de 250 mililitros; en 2009 fueron 450; en 2013, 750, y en abril de 2018 llegó a 964 mililitros, es decir, casi un litro, pero aún es bajo en comparación con Europa (45 litros per cápita), con países como Chile y Argentina (25 litros) y en la región del TLCAN (15 litros).

Confió en que la recién aprobada Ley de Fomento a la Industria Vitivinícola incida en una mayor producción y por tanto presencia del vino nacional en el mercado interno. Esta ley aprobada por el Congreso pone un marco legal para que los tres órdenes de gobierno diseñen políticas públicas junto con el sector privado para canalizar incentivos, realizar inversiones y elevar tanto la producción de vid en el campo como las capacidades instaladas. También las posibilidades de ampliación de proyectos enoturísticos, culturales y a nivel de festivales.

Destacó la necesidad de incrementar la cantidad de hectáreas sembradas con uva para vinos de mesa. Actualmente, se cultivan 6 mil 747 hectáreas y se requiere un crecimiento anual de 10 por ciento. Tan sólo este año estimamos la necesidad de crecer en unas 433 hectáreas. Si de forma sostenida se aumenta 10 por ciento anual, en 10 años habrá un crecimiento de entre 800 a mil hectáreas. En una década se estarían sembrando de 13 a 15 mil hectáreas y crecería la participación del mercado interno de 29.3 por ciento a 40 o 45 por ciento.

México produce vinos tintos, rosados, blancos y espumosos, que tienen la misma calidad que los extranjeros. En los últimos cinco años más de mil 200 etiquetas nacionales han sido premiadas en concursos internacionales.

Tras señalar que 75 por ciento del vino que se produce en el país es tinto, dijo que ya no sólo Baja California es zona vitivinícola, ahora también se producen vinos en Coahuila, Querétaro, Guanajuato, Zacatecas, Aguascalientes, San Luís Potosí, Chihuahua, Sonora y Nuevo León.