A dos meses de iniciar el ciclo escolar 2018-2019, la Secretaría de Educación Pública (SEP) puso en marcha el proceso para la implementación de una reforma curricular de las escuelas normales, con la que se modifican los planes de estudios de las 16 licenciaturas que se imparten para la formación de maestros en México.

La medida, reconoció el subsecretario de Educación Superior, Rodolfo Tuirán Gutiérrez, en entrevista con La Jornada, generará un intenso debate, que nos parece muy sano entre las comunidades normalistas, y no es una discusión a la cual queramos rehuir.

Sin embargo, desde mayo pasado decenas de escuelas normales han manifestado su rechazo a la implementación de los nuevos planes de estudio o mallas curriculares, que fueron presentadas este 13 y 14 de junio a los directores de las 233 instituciones de formación de maestros públicas del país, en un encuentro convocado por la SEP en Saltillo, Coahuila.

Profesores de diversas escuelas normales aseguraron que la convocatoria para participar en el diseño de los nuevos planes de estudio, que inclu-yen la enseñanza del inglés en seis semestres de la carrera docente y desaparece la formación de alfabetización inicial, no fue amplia ni mucho menos inclusiva, y lo que pedimos es que se posponga esta implementación hasta en tanto logramos abrir un verdadero debate de la comunidad para definir el maestro que queremos formar y cómo busca-mos hacerlo.

Por su parte, Tuirán Gutiérrez rechazó que pueda suspenderse el proceso de reforma curricular de las normales, debido a que uno de sus principales cambios es que por primera vez en los pasados 30 años se produce simultáneamente con la modificación curricular de la educación básica, lo que no es un cambio menor.

Agregó que en los próximas días se iniciará la capacitación de los docentes que impartirán los nuevos cursos formativos en las escuelas normales, y seguramente lo que veremos en las siguientes semanas se verá un mayor intercambio, y eventualmente un debate al respecto, pues destacó que algunas licenciaturas incluso cambiaron de nombre.

El responsable de la educación superior afirmó que las modificaciones a los planes de estudios de la formación inicial de maestros no se resolvieron en unos días, es un tema que tiene más de dos años de discusión con 321 docentes que representan a las comunidades normalistas, y por otro, de 60 especialistas que colaboraron en el diseño curricular de la educación obligatoria. Ahora empieza un procedimiento para que todas las comunidades normalistas participen, y eventualmente, discutan con amplitud el diseño.

Al participar en el foro La reforma a las normales: ¿tecnocracia o humanización?, Ruth Mercado Maldonado, profesora del Departamento de Investigaciones Educativas del Cinvestav y experta en el estudio de la formación inicial de docentes, destacó que la nueva reforma en las normales no incorpora ninguna de las grandes temáticas de lo que se está discutiendo en el mundo sobre la capacitación de maestros.

Subrayó que con este nuevo plan de estudios no se forma ningún maestro bilingüe, pero se reducen a su mínima expresión asignaturas fundamentales para la formación profesional de los futuros académicos.

Al respecto, Cenobio Popoca, de la Benemérita Escuela Nacional de Maestros, donde se ha manifestado de manera abierta el rechazo a la implementación de la reforma, al igual que en la Veracruzana Enrique C. Rébsamen, consideró que no hubo una amplia discusión de lo que buscamos construir como formación inicial de docentes, y no se trata de generar un enfrentamiento entre comunidades normalistas, sino de abrirnos realmente al diálogo.