Samara

Los logros históricos obtenidos por Costa Rica en el Mundial anterior son cosa del pasado y los ticos están listos para escribir un nuevo y glorioso capítulo con su portero estrella Keylor Navas.

Ese es el mensaje del entrenador Óscar Ramírez, en víspera de hacer su presentación en Rusia contra Serbia en la ciudad de Samara. Los equipos están en un difícil grupo que incluye a Brasil y a la selección de Suiza, sexto puesto de la clasificación mundial de la FIFA.

Hace cuatro años, los ticos salieron primeros de un sector que incluyó a Inglaterra, Italia y Uruguay, y avanzaron a los cuartos de final, fase en la que nunca antes se habían instalado, para después ser eliminados tras una definición por penales ante Holanda.

Ya pasó 2014, es nuestro listón máximo a nivel de mundiales, y ya es otra historia, enfatizó Ramírez.

El reto para el entrenador costarricense ha sido consolidar a nuevas figuras para encajarlas con referentes experimentados de Brasil 2014, como el arquero del Real Madrid, Keylor Navas; el capitán Bryan Ruiz, y el defensa del Bolonia, Giancarlo Gonzales.

Los centroamericanos enfrentarán a un rival que está en la plaza 34 de la lista de la FIFA. El entrenador serbio, Mladen Krstajic, ha armado un cuadro versátil que incluye al mediocampista Nemanja Matic, del Manchester United, y a Sergej Milinkovic-Savic, el espigado y veloz medio de contención de la Lazio. Serbia terminó en el último puesto de su grupo en el Mundial de Sudáfrica, y no logró la clasificación a Brasil.

La buena noticia para Serbia es que Mitrovic y el centrocampista Adem Ljajic se han recuperado de golpes leves y entrenaron en la semana con el resto del equipo.

Krstajic, sin duda, tiene a su disposición mucho talento en el mediocampo y el ataque, pero la historia es diferente en defensa.

El veterano Branislav Ivanovic puede convertirse este domingo en el jugador con más participaciones en la selección de Serbia con 104 encuentros.