La inauguración de la muestra Evocaciones, el martes 12, es el acto estelar de la celebración por un hito: el Museo Nacional de San Carlos cumple 50 años.

Reúne 255 obras, entre pintura, escultura, grabado y dibujo; 187 provienen de su acervo de 2 mil 20 piezas que abarca del siglo XIV a principios del XX.

Carmen Gaitán, directora del museo fundado el 12 de junio de 1968, anunció que destaca una Madonna del pintor italiano Pontorno (1494-1557), ahora sí con certificado de autenticidad elaborado por el Instituto de Investigaciones Estéticas de la Universidad Nacional Autónoma de México, después de practicar pruebas durante tres meses. Es casi como tener un Da Vinci, dijo.

El Museo Nacional de San Carlos abrió sus puertas en 1968 gracias a una serie de conjugaciones políticas y culturales entre Adolfo López Mateos y otra serie de administradores de la cultura de la época, que pugnaron y dijeron que ya era hora de que México tuviera un recinto reservado al arte europeo, porque durante siglos éste había sido precisamente el paradigma de lo que eran los modelos estéticos a seguir. Gaitán recordó que las obras de los artistas que resguarda San Carlos, son de los que en su momento rompieron paradigmas, como Cranach y Pedro Berruguete.

El juicio entre la virtud y el vicio, cuadro de Francesco Podesti, incluido en la exposición montada en el Museo Nacional de San Carlos (Puente de Alvarado 50, colonia Tabacalera), que marca el acto central de la celebración del recinto que dirige Carmen GaitánFoto cortesía del museo

Diálogo entre obras

Ana Garduño, curadora de Evocaciones, explicó que el acervo del museo es uno de los más ricos con los que contamos a escala nacional, tanto público como privado. En la muestra las piezas seleccionadas negocian y dialogan con otras que fueron prestadas por instituciones hermanas, como la Antigua Academia de San Carlos, que en algún momento de su historia fue un acervo compartido, y el Museo Nacional de Arte.

La historiadora del arte dijo a representantes de la prensa que uno de los planteamientos de la muestra es que si no se entiende la colección del Museo Nacional de San Carlos, no podremos comprender el arte mexicano; es el referente, el espejo que refleja las propuestas vanguardistas del arte mexicano de todos los tiempos.

Es una colección primigenia, matriz y el origen de nuestros acervos públicos en materia de arte.