¿Un mundo maravilloso?
Mexicanos cerca del abismo
Ingreso laboral insuficiente
oce años atrás se estrenaba la película mexicana Un mundo maravilloso, del gran director, productor y escritor Luis Estrada (La ley de Herodes, El infierno y La dictadura perfecta, entre otras), que narra la idílica versión oficial de que en México la pobreza había sido totalmente erradicada gracias a las políticas públicas puestas en marcha por el gobierno, con el secretario de Economía como operador.
Por aquellos tiempos llegaba a su fin el sexenio del cambio
, de Vicente Fox (que de cambiar no cambio absolutamente nada; de hecho, todo lo empeoró) y a punto de iniciar el de Felipe Calderón, quien a los mexicanos prometía vivir mejor
(en la realidad destrozó el de por sí raquítico nivel de bienestar de la población y dejó un regadero de sangre por toda la geografía nacional, entre otras gracias).
Espléndida película de Estrada, como todas las que llevan su firma. Pero a 12 años de distancia de aquel estreno, y con un tercer sexenio –el de Peña Nieto– en la cuenta (que también prometió mover a México, erradicar la pobreza y mejorar el bienestar de los mexicanos, con los resultados por todos conocidos y padecidos), el empobrecimiento de los mexicanos ha sido constante y alcanza niveles verdaderamente peligrosos, tanto en lo social como en lo político.
En agosto de 2015, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) advertía que el ingreso de los mexicanos prácticamente no se había movido en términos reales y resultaba similar al registrado en 1995. Se puede decir lo mismo en 2018, de tal suerte que aquel mundo maravilloso se mantiene como parte de la novela rosa que sexenio tras sexenio les cuentan a los mexicanos.
En este sentido, el Centro de Investigación en Economía y Negocios (CIEN) del Instituto Tecnológico de Monterrey, campus estado de México, advierte que los ingresos laborales resultan insuficientes para satisfacer las necesidades de los trabajadores, y en abril pasado tal ingreso promedio a nivel nacional fue de mil 728 pesos mensuales
, de acuerdo con el Coneval. De su análisis semanal se toman los siguientes pasajes.
El costo diario de la canasta alimentaria para una persona que vive en el campo (21 productos básicos para la alimentación) suma 35.10 pesos, el equivalente a casi 40 por ciento de un salario mínimo general en nuestro país.Una situación similar se presenta al revisar la información pertinente a la población urbana (canasta alimentaria de 34 productos), pues el costo diario asciende a 49.40 pesos, casi 56 por ciento de un salario mínimo.
Adicionalmente, el Coneval también construye una canasta no alimentaria, con bienes y servicios de uso cotidiano,tanto para la población urbana como rural. Si bien la cantidad de productos y servicios es la misma para las dos categorías de la población, el dinero que se gasta en cada una de ellas es diferente. Por ejemplo, se estima que una persona que vive en el campo gasta al mes 150 pesos en trasporte público, 91 en cuidado personal y 111 en educación cultura y recreación.
En total, el valor mensual de la canasta no alimentaria rural durante abril de 2018 fue de 866 pesos. Por su parte, algunos ejemplos de los gastos estimados de la población urbana son 245 pesos mensuales en transporte, 143 para cuidado personal y 292 en educación, cultura y recreación.
El costo total de la canasta no alimentaria para una persona que vive en la ciudad es de mil 487 pesos mensuales.Al sumar el valor mensual de las canastas alimentaria y no alimentaria de la población rural se obtiene la cantidad de mil 919 pesos, lo que significa que si una persona obtiene una remuneración diaria de 64 pesos podría cubrir el costode todos los bienes y servicios de primera necesidad.
El problema radica cuando se tiene una familia de tres integrantes y no todos los miembros del hogar laboran. Para el caso de la población urbana la suma de dichas canastas asciende a 2 mil 969 pesos al mes, el equivalente a un salario de 99 pesos diarios, de tal forma que poco más de los 11 millones y medio de mexicanos que ganan en el mejor de casos hasta un salario mínimo (incluyendo aquellos que no perciben ingresos por su trabajo), les resulta insuficiente para satisfacer sus necesidades básicas con las percepciones recibidas por su trabajo.
El Coneval también calcula el ingreso laboral promedio (nacional y estatal), y en el primer trimestre de 2018 México registró un ingreso laboral mensual de mil 728 pesos en términos reales, suficiente
para pagar la canasta alimentaria (rural y urbana), pero se queda corta cuando se incorpora el costo de la canasta no alimentaria, de manera que en promedio a la población de nuestro país le resulta insuficiente su ingreso laboral para satisfacer sus necesidades básicas.
Al revisar el ingreso laboral promedio por entidad federativa se aprecia que ninguna de ellas reúne la cantidad necesaria para comprar las canastas alimentaria y no alimentaria. La mejor
posicionadafue Baja California Sur, que se quedó corta por 56 pesos; en segundo lugar, se ubicó la Ciudad de México, a la cual le faltaron 502 pesos, y en tercer lugar Colima con 585 pesos.
La situación más crítica se vive en la región sureste donde varias entidades no lograron obtener la suma del valor de la canasta alimentaria rural, como en Guerrero, que se queda corto en 68 pesos, Oaxaca,que le hacen falta 120 y Chiapas con 154.
La reducción del personal ocupado en los rangos salariales más elevados ha provocado que sea más complicado para un porcentaje importante de la población acceder a los bienes indispensables para satisfacer las necesidades básicas.
Para evitar que esta tendencia se mantenga vigente se debe incentivar la generación de proyectos que permitan el desarrollo de bienes y servicios de alto valor agregado. La creación y desarrollo de nuevas tecnologías, la aplicación de nuevos procesos que permitan incrementar la productividad de las empresas, la investigación en temas de alto impacto en los próximos años, como la automatización y la implementación de la inteligencia artificial y analítica de datos en los negocios son algunos elementos que se deben desarrollar para promover inversiones importantes.
Y, desde luego, incrementar los salarios, dejando atrás la política de generar empleo precario.
Las rebanadas del pastel
Finalmente, Mariano Rajoy se hundió en la alberca de mierda que durante años construyó junto con el Partido Popular. De su defenestración no lo salvó ni el recuerdo de Franco… Cierra semana financiera con el dólar a 20.48 miserables pesitos.
Twitter: @cafevega