La Iglesia católica y organizaciones aliadas aprovechan los pronunciamientos para promover la participación de los creyentes en las elecciones del 1º de julio para impulsar además sus agendas. Si bien no invitan a votar por algún candidato en particular, sí exponen qué elementos deben considerar, como elegir a quienes propongan principios y valores que realmente construyan el bien común, estén en favor de la vida y en contra del aborto y apoyen la familia natural.

Especialistas refieren que estas expresiones son una forma de manipular las conciencias de las personas y con ellas buscan garantizar que se imponga la agenda conservadora.

En el mensaje difundido en abril por la Conferencia del Episcopado Mexicano, además de impulsar la participación y exhortar a los católicos a no dejarse manipular ni buscar el mal menor, sino el bien posible, también señalan verdades fundamentales reveladas por Jesucristo, que son accesibles a la razón humana y que ayudan a que la vida de todos sea más digna y libre.

Expresan el respeto que merecen las personas desde el momento de la fecundación y hasta la muerte natural, la importancia del matrimonio heterosexual y monogámico, la vigencia de la más plena libertad para vivir de manera individual y asociada de acuerdo a nuestras opciones en conciencia en materia religiosa, la centralidad ética y social que poseen los más pobres y excluidos de nuestras sociedades, etcétera.

El Consejo Nacional de Laicos en México señaló el 19 de mayo que el candidato idóneo debe representar los valores y principios que abonan a la construcción del bien común, promoviendo a la familia y defendiendo la vida.

La plataforma Voto Católico, impulsada por diversas organizaciones de inspiración cristiana, busca difundir contenidos e información que ayuden a los creyentes y la sociedad en general a orientar las decisiones trascendentales de su vida, de acuerdo con principios y valores fundamentales. Resalta la vida, la familia, el matrimonio y la libertad religiosa como temas relevantes, y califica el actuar de los candidatos a la Presidencia con emojis que expresan enojo, felicidad o indecisión.

Se han emitido otros documentos parecidos, como el publicado por los obispos de Veracruz, que agregan a las consideraciones el respeto al derecho de los padres en la educación de sus hijos.

Ante tal situación, María Consuelo Mejía, directora de Católicas por el Derecho a Decidir (CCD) aseguró en entrevista que lo grave es que estos mensajes sirven para manipular las conciencias de la feligresía.

Sin embargo, añadió que encuestas realizadas por esta organización reflejan que más de 80 por ciento de católicos no quieren que la Iglesia influya en política ni está completamente de acuerdo con esta agenda, por lo que impulsarla refleja un desconocimiento muy grave de lo que realmente piensan.

Felipe Gaytan Alcalá, profesor investigador de la Universidad La Salle México, aseguró que estos pronunciamientos son una forma de guiar el voto o de influir en él, y que además intervienen en la política pública y temas jurídicos. Agregó que estos elementos no sólo provienen de la Iglesia católica, sino que se empatan con lo que han difundido los evangélicos.

Los conservadurismos, sean evangélicos o católicos, están imponiendo su agenda sobre todo en estos temas, en la gestión del cuerpo, libertades y derechos de los ciudadanos.