Setenta por ciento de las armas recuperadas en escenas de crimen en México y rastreadas, fueron compradas en Estados Unidos, señaló ayer la organización internacional de derechos humanos Global Exchange, al manifestar su oposición a una propuesta del gobierno de Donald Trump para facilitar la exportación de armamento.

Ello, dijo, sólo conduciría a mayor violencia y delincuencia, subrayó. Las armas de fuego vendidas por Estados Unidos a policías de México, han sido utilizadas en masacres y desapariciones forzadas, puntualizó John Lindsay-Poland, de la agrupación social.

Necesitamos revisiones de antecedentes internacionales para parar las exportaciones de armas de fuego a grupos militares y privados que las utilizan para la violencia o se coluden con el crimen organizado. México experimentó más homicidios con ese tipo de armamento en 2017 desde que empezó a documentarlos, añadió el activista.

La propuesta divulgada traslada la responsabilidad de revisar las licencias para exportar armas de fuego, entre las que se incluyen rifles de asalto, pistolas de alta capacidad y rifles de francotiradores que penetran vehículos blindados, del Departamento de Estado al Departamento de Comercio. Los cambios también plantean quitar al Congreso la facultad de revisar grandes contratos de ventas de armas.