Recomienda identificar riesgos, generar ingresos propios y ajustar finanzas
Descarta que la contratación de créditos se deba a reducción en las participaciones federales
Jueves 22 de febrero de 2018, p. 11
La Auditoría Superior de la Federación (ASF) recomendó a los gobiernos de los estados identificar riesgos, generar ingresos propios y ajustar sus finanzas, debido a que no se ha detenido el incremento de su deuda, que en 2016 ascendió a 567 mil millones de pesos, de los cuales 95 mil 795.7 corresponden a emisiones bursátiles.
En el resultado del examen a la situación fiscal de entidades y municipios, explicó que la mayor parte de sus pasivos son con bancos, de los que cuatro muestran alta concentración de créditos
de gobiernos locales.
La ASF recordó que a consecuencia de la crisis internacional de 2008, la economía mexicana se desaceleró, lo que a su vez afectó las finanzas públicas locales, que al año siguiente vieron reducidos sus ingresos propios y las participaciones federales en 14.3 por ciento real.
Detalló que la caída de 4.7 por ciento en el producto interno bruto (PIB) ese año, y el efecto de provocó en sus entradas provenientes de la Federación, fue compensada de manera parcial con las reservas financieras del fondo de estabilización de las entidades; para mantener el nivel de gasto, los gobernadores recurrieron a préstamos.
Aclaró que de 2010 a 2016, las participaciones se incrementaron a una tasa media de crecimiento real anual de 4.1 por ciento, y que si bien entre 2011 y 2013 vieron armadas sus finanzas, la Federación los compensó con el Fondo de Estabilización, por lo que la creciente adquisición de préstamos no se debe a una caída de transferencias federales.
Señaló que de 2008 a 2016, la denominada subdeuda nacional pasó de 203 mil 70 millones a 568 mil 591 millones de pesos, lo que significa un incremento 107.5 por ciento en términos reales, a consecuencia de que los estados no aplicaron medidas efectivas de consolidación fiscal, sobre todo de ajuste al gasto; refirió que las mayores tasas de endeudamiento fueron en Coahuila, Zacatecas, Morelos, Tamaulipas, Quintana Roo y Chihuahua.
En su informe a la Cámara de Diputados recordó que ha explicado a los gobiernos locales la importancia de reducir paulatinamente su dependencia de las transferencias federales para inversión en infraestructura y la provisión de bienes y servicios públicos.
Incluso, señaló que el incremento del déficit presupuestario y la deuda de las entidades no se ha utilizado para inversión pública productiva, y esto se refleja en el hecho de que en el periodo 2008-2014, el gasto de inversión bajó 0.9 por ciento y el saldo de la deuda creció 12.5 real en el país.
La ASF expuso que según las proyecciones de ingresos y egresos contenidas en las iniciativas de gasto para 2017, se estima que entre ese año y 2022 los recursos de los estados podrían incrementarse 20.6 por ciento y los egresos 15.6, lo cual podría derivar en una reducción del financiamiento crediticio en 58.2 por ciento.
Informó que si bien algunos estados y municipios enfrentan deterioro en sus finanzas públicas por los elevados déficits primarios y su limitada capacidad de generar recursos propios, la probabilidad de que se registre un no pago
que ponga en riesgo la estabilidad del sistema financiero en el corto plazo es baja, debido a que la posibilidad de incumplimiento de los créditos otorgados a las entidades es reducido, aunque en el caso de los ayuntamientos se ubica en un rango alto.