Por unanimidad, el Senado aprobó ayer la llamada ley Fintech, nueva legislación para regular a las instituciones de tecnología financiera (ITF) desde las que se realizan operaciones electrónicas.

Ante el pleno, senadores panistas y del PT Morena resaltaron la importancia de que la Secretaría de Hacienda aceptara al final varios cambios a la iniciativa presidencial, entre ellos que se sancione a quien cometa robo de identidad para realizar operaciones financieras electrónicas, con castigos de tres a nueve años de prisión.

La reforma, que incluye además modificaciones a otras leyes en la materia y fue aprobada con 102 votos a favor y ninguno en contra, permite el uso de la firma electrónica avanzada o cualquier otra forma de autenticidad para dar acceso a sus clientes a su infraestructura tecnológica, contratar sus productos y servicios o realizar operaciones.

Permite, asimismo, el uso de activos virtuales como las criptomonedas o bitcoins, previa autorización del Banco de México. Las ITF operarán con ambos, como representaciones de un valor digital verificable que no tienen curso legal, pero generan unidades para su intercambio.

La nueva ley Fintech impone sanciones administrativas y penales para quien incumpla con las disposiciones ahí contenidas.

El presidente de la Comisión de Hacienda, el priísta José Francisco Yunes Zorrilla, sostuvo que el nuevo marco legal pone orden y da certeza jurídica a quienes participan en operaciones vía Internet, transferencias y pagos electrónicos.