En el lugar persisten insalubridad y trato inadecuado a las personas, reporta la comisión
Detecta plaga de insectos en dormitorios, falta de agua en baños e inapropiado servicio médico
Lunes 4 de diciembre de 2017, p. 19
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) emitió una recomendación al titular del Instituto Nacional de Migración, Ardelio Vargas, al acreditar que en la estación migratoria de Saltillo, Coahuila, se vulneran los derechos al trato digno, a la protección de la salud, seguridad jurídica, solicitud de refugio y el interés superior de la niñez.
El organismo presidido por Luis Raúl González Pérez comprobó que en este centro de retención migratoria persisten condiciones de insalubridad; trato inadecuado a las personas migrantes; incluidas niñas, niños y adolescentes no acompañados, y falta de información respecto de su situación jurídica migratoria.
Por conducto de varias quejas conoció que en dicho centro, además de existir plaga de insectos en los dormitorios y escasez de agua en los sanitarios, no se brinda atención médica adecuada, ni llamadas telefónicas a las personas ahí detenidas.
No cuenta con infraestructura adecuada para brindar un alojamiento digno al tratarse de instalaciones construidas para un gimnasio; aunado a ello, el personal no proporciona información oportuna a las personas migrantes sobre el estado de sus Procedimientos Administrativos Migratorios (PAM), y negó los formatos para solicitar el reconocimiento de la condición de refugiado a cinco personas, con la explicación de que la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) no resolvería su petición de manera procedente.
El personal de la CNDH efectuó varias visitas a esa estación migratoria y documentó carencia de dormitorios para albergar a personas en situación de vulnerabilidad, como personas mayores, niñas, niños y adolescentes; inexistencia de áreas recreativas; extravío de pertenencias que las personas pusieron en resguardo al momento de ingresar; estancias prolongadas de más de 60 días hábiles; omisión de la información sobre la situación migratoria; condiciones insalubres que afectaban la salud de los detenidos, lo que motivó que se solicitara la implementación de medidas cautelares.
“A pesar de las medidas cautelares solicitadas para erradicar la plaga de insectos en los dormitorios –que había provocado problemas de salud a niñas, niños y adolescentes migrantes alojados–, suministrar agua suficiente y reparar las instalaciones de los servicios sanitarios, las acciones del INM fueron insuficientes, lo que vulneró el trato digno y el derecho a la protección de la salud de las personas extranjeras alojadas”, indicó la CNDH en la recomendación.