Moscú.

Pese al impacto financiero que representan las ausencias de selecciones como Italia y Estados Unidos, la Copa del Mundo de Rusia 2018 cumplirá con la meta de ingresos de 5 mil 660 millones de dólares que tiene previstos la FIFA, afirmó Philippe Le Floc’h, director comercial del organismo.

La derrota de Italia en la eliminatoria europea restó decenas de millones de dólares al valor de los derechos de transmisión que todavía no han sido vendidos. Italia es uno de los mer- cados más valiosos para la FIFA, con valor de 200 millones de dólares por cada Mundial.

En tanto, el fracaso de Estados Unidos en la eliminatoria de la Concacaf afecta la búsqueda de cuatro patrocinadores estadunidenses para un nuevo programa regional de ventas. Por ahora, sólo se ha vendido uno de 20 puestos para patrocinadores mundiales, y fue a un banco propiedad de un oligarca ruso.

Todos estamos molestos porque Estados Unidos no se clasificó, lo que francamente fue algo inesperado, dijo Philippe Le Floc’h, quien ha buscado acuerdos con firmas estadunidenses del campo de la tecnología.

De todas formas, el funcionario insistió que la FIFA alcanzará su meta de ingresos para el periodo de ventas de 2015-18, incluso con algunos huecos en el pelotón de 34 posibles patrocinadores.

La FIFA no divulga el valor de cada acuerdo, aunque la categoría de patrocinadores regionales recibió cuatro millones de dólares en 2016 de parte del banco ruso Alfa-Bank, según un informe financiero del organismo rector del futbol.

La venta de derechos para el Mundial de 2018 ha estado enmarcada por la incertidumbre sobre la posibilidad de que más funcionarios de la FIFA sean acusados de corrupción.

El organismo quizá no iguale los ingresos de 5 mil 700 millones de dólares que logró para Brasil 2014. No obstante, hace seis años firmó acuerdos con Fox y Telemundo para la transmisión de Rusia 2018 en Estados Unidos, por lo que la FIFA tiene ingresos garantizados para este torneo.

Le Floc’h señaló que los mercados de patrocinadores más importantes ya no están en Europa, sino en Estados Unidos, Asia y el Medio Oriente.