Viernes 1º de diciembre de 2017, p. 2
En la madrugada del 3 de diciembre de 1967, el cirujano Christiaan Barnard realizó con éxito el primer trasplante de corazón en Sudáfrica. La hazaña le valió el reconocimiento de sus pares y el odio de quienes le reprocharon actuar como si fuera Dios. No habíamos imaginado que este logro fuera a generar tanta indignación pública
, señaló la enfermera Dene Friedmann, quien asistió a esa cirugía. “El profesor Barnard recibió cartas horribles; lo calificaban de ‘carnicero’”, recordó la septuagenaria. La comunidad científica celebró la proeza técnica y muchos ciudadanos de a pie se sumaron a las felicitaciones. El cirujano sudafricano de 45 años ganó la carrera a los estadunidenses, que estaban en proceso de lograr la hazaña. En parte se debió a que la definición jurídico-médica de la muerte es distinta en ambas orillas del Atlántico.