Rebasados y exhibidos
l primer torneo femenil, del que resultó campeón Chivas con brillante reacción en el partido de vuelta contra Tuzas, rebasó a los federativos y directivas de clubes. Los de pantalón largo iniciaron la aventura con excesivos temores y palpable apatía, y en la recta final se treparon al tren que amenazaba con dejarlos a un lado, en el que iban con desbordado entusiasmo jugadoras y aficionados.
El público fue el primero en evidenciar los pésimos cálculos. Mandaron a las chicas al rincón de la muñeca fea y las pusieron a jugar en campos de práctica. Las gradas de Coapa, Verde Valle, La Noria, Colomos... muy pronto resultaron insuficientes para una afición convencida, ansiosa por disfrutar su deporte favorito en la versión femenil. Se llegó a hablar de la necesidad de contratar uniformados para el control de masas en esos lugares.
Un aplauso para Tijuana, que fue el primer club que dispuso para ellas su mejor escenario. Poco a poco se abrieron los estadios, empezando por el Hidalgo, de las Tuzas. Las futbolistas, con su gran entrega y por derecho propio fueron conquistando territorios –a veces cobrando entradas simbólicas, en ocasiones gratis–; el avance fue firme y el Azteca, el máximo recinto, no se resistió a ese empuje.
También los patrocinadores y las televisoras hicieron el rebase. Con su sensible olfato para los negocios, Fox Sports fue el primero en reaccionar y alzar la mano para transmitir partidos. Los patrocinadores pululan ansiosos. En el festejo del viernes en el coso de Chivas, corrían cómicamente para acercarse a las campeonas que daban entrevistas, pues buscaban exhibir sus marcas frente a las cámaras de televisión.
Ellas educaron con un silencio majestuoso, porque no faltaron los inadaptados –por fortuna muy pocos– que ocultos en el anonimato les lanzaron el grito que tantas sanciones ha provocado a la federación mexicana ante la FIFA. En la cancha todo fue frescura, sin los vicios que abundan en el futbol de varones. Más lealtad y respeto hacia el rival, sin golpes malintencionados, sin afanes de engañar a los árbitros.
Las mayores de edad son la base. Futbolistas como Mónica Ocampo, Nayeli Rangel o Tania Morales, todas ellas de más de 23 años, cumplieron un papel destacado; fueron pilares y un ejemplo a seguir para las menores. No es justo que sólo jueguen dos mayores de 23 años por equipo, pues elementos como las porteras Blanca Félix, Cecilia Santiago o la delantera de Tigres Fabiola Ibarra tendrían por delante una carrera demasiado corta.
Exhibido, Leonardo Cuéllar. El ex dirigente de las selecciones femeniles desdeñó mucho talento por razones poco claras. Tuvo entre sus filas a la extraordinaria Tania Morales, capitana de Chivas, y de forma increíble la desechó. Historia similar es la de Anjuli Ladrón, portera de Xolos, quien, decepcionada, estuvo al borde del retiro y se refugió en otras disciplinas. Más desafiante resultó Charlyn Corral, quien renunció al Tri y se autoexilió.
Dos voces que piden el anonimato coinciden y acusan a Cuéllar: Siempre prefirió a las mexicanas-estadunidenses. Convenció a los federativos de que el genotipo de las mexicanas no daba para competir, por chaparritas o qué sé yo
. En evidencia quedó también Justino Compeán, quien jamás creyó ni impulsó una liga femenil, a pesar de todos los programas y apoyos que ofrece la FIFA.
El ente rector del balompié mundial aprovecha el deporte más popular del orbe para luchar por la igualdad de género y para ello elabora un programa cada cuatro años; en él subraya que quiere mujeres árbitros y en el banquillo, como entrenadoras. Habrá oportunidad para muchas más en cuanto se organicen los equipos de categorías inferiores.
Las jugadoras pujan por paridad en las nóminas. Las cifras con que arrancó la Liga Mx femenil y su tope salarial son una burla. Es tan irrisoria la cantidad de 2 mil 500 pesos al mes que muchos clubes no la respetaron. En sueldos marcan la pauta las noruegas, que, al menos a nivel selección, lograron que se les pague lo mismo que a los hombres. En esa lucha están las danesas y estadunidenses.
Impera la lógica en la liguilla: los equipos que mejor desempeño tuvieron en el torneo regular avanzaron a semifinales con Monterrey y Tigres a la cabeza. El Morelia canceló las ilusiones en Toluca, que se quedó con las ganas de celebrar con el título su centenario. José Cardozo fue cesado del timón del Veracruz y a Ricardo Tuca Ferretti, hombre récord en el futbol mexicano, le dieron regalo navideño anticipado con la extensión de su contrato hasta 2020.
