El gobierno federal y el PRI acudieron a todo tipo de maniobras para impedir que el Senado objetara la remoción de Santiago Nieto como fiscal electoral, con el fin de frenar las investigaciones sobre los sobornos de Odebrecht a Emilio Lozoya, advirtieron senadores de PT-Morena.

En su gestión al frente de Pemex se otorgaron al consorcio brasileño contratos millonarios, con sobreprecios hasta de 61 por ciento, como documentó la Auditoría Superior de la Federación (ASF), señalaron.

Coincidieron en que a pesar de que este viernes venció el plazo del Senado para objetar el cese del titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade), insistirán en que avancen las investigaciones de los sobornos de Odebrecht, que presuntamente fueron a parar a la campaña presidencial del PRI en 2012.

Irregularidades halladas por la SFP, apenas una muestra

Dolores Padierna, Manuel Bartlett y Luis Humberto Fernández destacaron que son enormes las irregularidades que la ASF detectó sólo en los contratos otorgados a la empresa brasileña para mantenimiento y reconfiguración de las la refinerías de Tula y Salamanca, pero apenas una muestra de la gran corrupción en torno a ese caso.

Llama la atención que los contratos a Odebrecht, por cierto, adjudicados durante la administración de Lozoya, a pesar de ser por montos muy elevados se otorgaron por asignación directa, y su total se elevó de 4 mil 993 millones a 6 mil 231 millones de pesos. Es decir, un incremento de 24.8 por ciento, que parece injustificable, toda vez que las obras se deberían realizar en sólo un año, resaltó Padierna.

Destacó que, aunado a ello, fueron obras sin resultado, ya que en el caso de la refinería de Salamanca, la producción de petrolíferos cayó 30.8 por ciento y la de Tula 37.5 en los recientes tres años.

Sobre el tema, el coordinador de PT-Morena, Manuel Bartlett, resaltó que el cese de Santiago Nieto de la Fepade y las presiones y amenazas posteriores para evitar que el Senado llevara a cabo el procedimiento para reinstalarlo en el cargo, forman parte de la decisión del gobierno federal de impedir que salga a la luz pública la corrupción de Odebrecht.

Sin embargo, aunque en México lo oculten, es una investigación que está en Brasil y en muchos otros países, y van a seguir saliendo a relucir los moches a Lozoya, expuso a su vez el senador Fernández.

Por su parte, Mario Delgado consideró que las investigaciones deben alcanzar no sólo a directivos de Pemex, sino también a empresas mexicanas, como Construcciones Tapia, favorecidas por Odebrecht con diversas obras. Hay que saber qué firmas nacionales están siendo beneficiadas y qué nexos tienen con funcionarios de Pemex.